Muelle Histórico recibió a sus primeros visitantes
Patrimonio. Nostalgia inundó a antiguos vecinos que crecieron mirando al centenario embarcadero.
Fue bastante la demora y los problemas que brotaron a su alrededor, pero la espera valió la pena y ayer, en medio del 'Día de las Glorias Navales', por fin los antofagastinos volvieron a caminar por el muelle histórico Melbourne and Clark.
La obra de restauración tuvo una inversión de 6 mil millones de pesos, tardó más de un año en concretarse y se espera que el ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, la inaugure a fin mes o principios de junio en forma oficial.
Los antofagastinos que llegaron al lugar disfrutaron de sus instalaciones, miraron el mar por el vidrio de su piso y sintieron esa brisa del borde costero en sus rostros.
La ejecutiva de ventas, Paola Venegas explicó que "me encantó esta iniciativa y ojalá la gente lo cuide".
El jubilado René Quiroga recordó sus años juveniles en el muelle mientras lo recorría y señalaba los lugares donde se ubicaban oficinas, bodegas, la herrería y los estanques de petróleo. "Yo trabajé acá. Esto antes se llamaba Astillero Foram, después pasó a ser Astillero Corfo y después se llamó Hydrotherm".
Viviana Salcedo, dueña de casa, explicó que "mantuvieron hartas cosas, el color, algunas maderas de pino oregón. Y faltaba algo así para los antofagastinos, para venir a mirar. Lo malo es que la gente no cuida bien estas cosas".
Álex Cruzatt, guardia de seguridad, contempló el muelle renovado con nostalgia. "Me tiré como cinco veces de allá arriba. Cuando joven uno no mide los riesgos y me acuerdo del astillero y ahora encuentro que es algo espectacular".
"Yo venía con mi mamá a comprar a la caleta, veíamos el astillero, las goletas. Incluso si tú miras hacia el mar todavía puedes ver las líneas del tren por donde bajaban los barcos", agregó nostálgico.