José Luis Ramírez M.
A cinco meses de la "puesta en servicio provisoria" del nuevo Hospital Regional de Antofagasta, el Servicio de Salud y los jefes clínicos del establecimiento preparan los detalles del traslado.
La obra, que está a cargo de la Sociedad Concesionaria Salud Siglo XXI, supera el 85% de avance y, de no haber complicaciones en la tareas finales (relacionadas con la instalación de los equipos médicos), debería cumplir con cierta holgura sus plazos de ejecución.
El director del SSA, Zamir Nayar, dijo que con miras a la puesta en servicio, se trabaja en el diseño e implementación del plan de operaciones, tarea donde están interviniendo todos los estamentos del hospital, principalmente los equipos de las áreas clínicas.
La apertura de un gran establecimiento como el que tendrá Antofagasta representa un gran desafío, y es por eso que el SSA estudia con cuidado sus decisiones.
Nayar comentó que aunque la planificación final no está lista, lo que se ha pensado es que las primeras en trasladarse sean las unidades que brindan atención ambulatoria, seguidas por urgencia y luego las de mayor complejidad.
"El hospital (obra) va estar listo completo a fines de junio, pero no se puede abrir todo al mismo tiempo, eso no se hace así. Y la cronología, es decir, qué unidades primero y qué unidades después, es una decisión que vamos a tomar con los equipos clínicos", indicó.
La autoridad estimó que el establecimiento, cuya capacidad triplica al actual, recién podría tener todas sus unidades operativas en un plazo de tres o cuatro meses.
Brecha
Una de las complejidades que enfrenta el Servicio de Salud tiene que ver con asegurar las dotaciones que se requerirán en el hospital concesionado.
Se calcula que el nuevo recinto médico necesita entre 2.000 y 2.200 funcionarios, en circunstancias que el actual sólo cuenta con 1.400.
El director del SSA comentó que la brecha exacta aún no está calculada, y dependerá de las definiciones clínicas que se adopten. A modo de ejemplo, mencionó que "si se determina que se requieren 200 camas de cuidados medios, se necesitará más personal que si definen sólo 100 camas".
Consultado por el origen de este personal extra, que idealmente de tener un proceso de inducción en el actual Hospital Regional, el directivo planteó que se recurrirá al traslado de funcionarios que ya están en la red y a los profesionales que están saliendo de universidades e institutos.
Además, por las expectativas profesionales que ofrecerá el nuevo centro asistencial, Nayar espera que su puesta en funcionamiento también despierte interés entre personal del sector privado.
Médicos
Aunque es una de las preocupaciones del servicio, el presidente del Colegio Médico, Aliro Bolados, restó relevancia a la brecha de personal en el funcionamiento del hospital.
Según el médico, lo usual es que cuando un establecimiento se traslada y aumenta su complejidad, las dotaciones al inicio no sean las ideales, sin embargo, esto pocas veces afecta la operación normal.
Bolados planteó que el ministerio deberá generar los cupos, hacer las contrataciones y, en aquellas especialidades donde exista poca oferta, tomar medidas para se produzca una ocupación paulatina y constante de las plazas hasta llenar la brecha.
Diputada inquieta por los plazos
La diputada Marcela Hernando estimó que los preparativos para la puesta en servicio del hospital avanzan lento, sobre todo a nivel de la preparación de los funcionarios para el cambio de cultura organizacional que supone pasar al modelo concesionado. Hay que precisar que el atraso en este aspecto del plan de traslado, habría generado hacer dos semanas la salida del director del hospital, Juan Urrutia. La parlamentaria y exdirectora del SSA, además llamó la atención respecto a las dotaciones, donde "aún no se ponen de acuerdo respecto a cuál es la real dimensión de la brecha".