José Luis Ramírez M.
La Dirección de Obras Hidráulicas (DOH) del MOP mantuvo las condiciones de diseño establecidas para el sistema de evacuación de aguas lluvias del relleno sanitario Chaqueta Blanca, desestimando así la petición realizada por el municipio en orden a revisar las exigencias realizadas.
La decisión complica el futuro del esperado proyecto sanitario, que -como se ha informado- enfrenta serios problemas financieros que podrían atrasar por tiempo indefinido el inicio de sus operaciones.
El problema surge a inicios de este año cuando la empresa Consorcio Santa Marta notifica a la municipalidad que ejecutar las obras de aguas lluvia comprometidas para obtener la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) del proyecto, costaría hasta $4 mil millones adicionales, cifra que duplicaría el valor de la iniciativa.
El antecedente motivó urgentes reuniones técnicas entre la municipalidad y el gobierno regional, en las cuales se tomó la decisión de solicitar a la DOH un pronunciamiento sobre los "criterios de revisión" empleados durante la evaluación ambiental del proyecto, en 2015.
La esperanza municipal era que dicha revisión de criterios mostrara sobre exigencias que facilitaran una rebaja en las magnitud de las obras, sin embargo esto no aconteció.
Respuesta
A través del Ordinario N° 2460, del 10 de mayo, la DOH responde a la municipalidad que el diseño de los canales evacuadores de aguas lluvia y el diseño geométrico presentado por Santa Marta son "adecuados y válidos", es decir, no corresponde modificación de ellos.
Agrega que cualquier cambio a lo propuesto, es una decisión que compete al titular del proyecto (Santa Marta), pero debe ser tramitada ante las instancias sectoriales y ambientales pertinentes, que en este caso sería el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA).
El director regional de la DOH, Manuel Gutiérrez, explicó que con esta definición -adoptada por el servicio en Santiago- las obras que debe ejecutar la empresa corresponden a las presentadas por ella misma y que aún no son aprobadas por el servicio.
Gutiérrez apuntó que la principal motivación de las exigencias tiene que ver con la seguridad de la población y en este sentido dijo que si Santa Marta no ejecuta las obras que presentó a evaluación o bien otras, "aumentaría la probabilidad de afectación".
Caminos
Con la respuesta, a la municipalidad se le comienzan a agotar los caminos para resolver el problema que amenaza al proyecto sanitario.
Una opción es presentar una nueva Declaración de Impacto Ambiental con la esperanza que durante su análisis se rebajen las exigencias, lo que parece improbable.
Otra es intentar modificar el proyecto a través de una "consulta de pertinencia", sin embargo en la legislación esta figura sólo se emplea para corregir aspectos menores y sin impacto ambiental de proyectos ya evaluados, que tampoco sería el caso.
Un tercer camino que ya intentó el municipio es lograr financiamiento adicional para el proyecto de la Subdere o el Gobierno Regional, sin embargo en ambos organismos existe reticencia (desde el nivel técnico), pues se plantea que el contrato firmado por Santa Marta la obliga a financiar las obras que comprometió en la RCA.
Este argumento, de momento, no ha sido explorado por el municipio.
Pese a los tropiezos, desde la municipalidad dijeron que seguirán gestionando una solución al problema.
"Estamos optimistas en poder sacar este importante proyecto para la comunidad adelante, un proyecto que ya lleva más de un 90% de avance. La próxima semana seguiremos en reuniones con el MOP para buscar la mejor solución al respecto, sobre todo pensando en el bienestar de nuestros vecinos, que por años han esperado el cierre del actual vertedero", dijo el administrador municipal Héctor Gómez.
Pese a ser consultada, la casa consistorial no realizó comentarios sobre los caminos que se abren, los plazos estimados de apertura del relleno sanitario y por qué el enorme sobreprecio fue detectado tan tardíamente.
Factor climático explica los cambios
Las obras que complican al municipio y a Santa Marta corresponden a la partida aguas lluvia y mitigación aluvial. En esta parte del proyecto la propuesta original hecha por la empresa fue calificada como insuficiente por la DOH, al estar basada en estudios y estimaciones de precipitaciones que no consideraban los nuevos escenarios climáticos. Debido a esto, Santa Marta reformuló la partida e incorporó mayores obras (canelones, muros y otros), que son las que ahora están desfinanciadas.