Comandante en jefe del Ejército defiende a Cheyre tras críticas
respaldo. General recordó la gestión del exoficial, cuestionado por entrega de menor.
El Ejército salió ayer en defensa de su excomandante en jefe Juan Emilio Cheyre, en medio de duras críticas de organismos de derechos humanos por su actual papel como presidente del consejo directivo del Servicio Electoral y su rol en la entrega de un menor de edad a un convento, luego de la muerte de sus padres en 1973, a manos de la represión militar.
"Él en su gestión de mando realizó incansables esfuerzos por la reconciliación", afirmó el actual comandante en jefe del Ejército, Juan Miguel Fuente-Alba.
fuertes críticas
El ex comandante en Jefe del Ejército ha recibido críticas en los últimos días por haber entregado a un menor de dos años a un convento de monjas en 1973, cuyos padres, el argentino Bernardo Lejderman y la mexicana María Rosario Ávalos, fueron fusilados por soldados del Ejército en Vicuña (Región de Coquimbo).
Cheyre, que fue ascendido a la comandancia de su institución por el expresidente Ricardo Lagos (2000-2006), respondió públicamente por la entrega de un niño de dos años a un convento luego que militares asesinaron a sus padres en 1973.
respuesta pública
"Jamás he ocultado mi pasado ni he dejado de asumir mis responsabilidades", dijo ayer el general (r) en declaraciones a El Mercurio. El exalto mililtar subrayó que él sólo entregó el menor a las monjas, sin participar en el crimen.
Ernesto Lejderman, el entonces niño huérfano y hoy un hombre de 40 años, aseveró desde Argentina que Cheyre "es cómplice en el crimen" de sus padres.
La defensa de Fuente-Alba se dio en el acto por el natalicio de Bernardo O"Higgins, una de las conmemoraciones más importantes para esa rama castrense, que fue encabezado por el Presidente Sebastián Piñera en Chillán.
"Yo fui cadete del general Cheyre y, por lo tanto, lo conozco hace más de 50 años, y si hay algo que lo ha caracterizado es asumir sus responsabilidades con carácter, asumir sus obligaciones con tremendo tesón, ha sido algo que lo ha acompañado durante toda su vida", agregó Fuente-Alba.
El juez Juan Guzmán Tapia, quien investigó el caso y varios crímenes en los que fue mencionado Cheyre, dijo a la agencia DPA que nunca tuvo antecedentes concretos que ligaran materialmente al exuniformado con violaciones de los derechos humanos.
Según datos de la agencia AP, el argentino Bernardo Lejderman y la mexicana Rosario Ávalos, de militancia izquierdista, se escondieron en las afueras de La Serena junto a su hijo Ernesto, de dos años. Habrían sido traicionados por un lugareño que reveló su ubicación a una patrulla militar, que asesinó a los adultos y se llevó al menor de regreso a su cuartel, en la ciudad.
"Al regimiento llegó ese día (8 diciembre de 1973) una patrulla que traía un niño de unos dos años. El comandante me transmite que es hijo del matrimonio que componían el argentino Bernardo Lejderman y la mexicana Rosario Ávalos, quienes se han suicidado con dinamita cuando estaban siendo perseguidos por esta patrulla, cuya misión era detenerlos", declaró el general retirado a El Mercurio.
Cheyre, entonces un joven teniente de 25 años, agregó que el comandante le dijo que ya había "tomado contacto con el arzobispo de La Serena, monseñor Juan Francisco Fresno, y me ordena buscar un convento de monjas que acoja al niño mientras él inicia los contactos con las embajadas de Argentina y México para buscar a sus abuelos".
"Lo limpié y de inmediato llevé al niño -jamás fue retenido en el regimiento- al convento, previo conversar con monseñor Fresno", agregó Cheyre.
La versión oficial de la época fue que el matrimonio argentino-mexicano se suicidó con dinamita. Sin embargo, 25 años más tarde un juicio reveló que la pareja fue asesinada por miembros de una patrulla militar del regimiento de La Serena.
El entonces jefe del regimiento de La Serena, Ariosto Lapostol, dijo la noche del lunes a TVN que "él (Cheyre) no intervino en absoluto, en nada". Lejderman fue criado por sus abuelos paternos en Argentina, donde continúa residiendo. Sus abuelos ya fallecieron.
El excomandante en jefe del Ejército enfatizó que en el proceso judicial por este caso "no se me imputó nunca nada, porque mi única acción fue ejecutar la orden de entregar al niño al convento", luego que, según le informaron, sus padres se habían suicidado con dinamita. Cheyre añadió que sólo décadas después se le "develó una verdad tergiversada por décadas por una versión oficial de la cual nunca tuve ningún antecedente para dudar".
MEO: "Es impresentable"
El candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami (PRO) dijo ayer que es "impresentable" la presencia en el Servel de Cheyre, a propósito de su relación con la entrega del hijo del matrimonio Lejderman-Ávalos. "Es impresentable, hace mucho rato lo venimos diciendo, que quien haya estado vinculado de cerca o de lejos de algo tan grave como esto, sea el garante del sistema electoral chileno, no es aceptable, es parte de nuestro fracaso como sociedad", aseguró.