PIB per cápita de Antofagasta aumentó 135% en sólo cinco años
Índice. El promedio de ingresos en la región está a la altura de países como Francia, Finlandia o Israel, superando por lejos la media nacional.
El explosivo crecimiento económico de Antofagasta parece no detenerse. En los últimos cinco años el Producto Interno Bruto (PIB) per cápita de la región pasó de los US$14.517 en 2008 al no despreciable promedio de US$34.186, la cifra más alta del país, incluso un 637% mayor a la media de Aysén, la zona con menor PIB a nivel nacional.
Sin duda, el dato es reflejo del auge de la industria minera, hoy el motor principal de la economía nacional. En la región se concentra el 80% de la actividad extractiva del país, con 16 operaciones que aportan más del 50% de la producción de cobre, un escenario sumamente atractivo para el arribo de las inversiones privadas.
Esta medición en palabras simples, es un cálculo que se realiza dividiendo todos los bienes y servicios que produce la región por el total de la población.
Análisis
Aunque los números son positivos para la economía local, los expertos coinciden en que los datos no necesariamente son un reflejo de una mejor calidad de vida.
Es más, las estadísticas dicen que no más del 10% de la población recibe los millonarios bonos de la minería.
En esta materia, el académico de la Universidad Andrés Bello y experto en macroeconomía, Víctor Valenzuela, recalcó que aunque la región genere más dinero mucho de estos recursos no se quedan en la zona, por lo tanto, el aumento de ingresos en la mayoría de los casos no se ve reflejado finalmente en el bolsillo de la gente.
"El PIB per cápita básicamente sirve como estadística. Pero lo que suele suceder en zonas como Antofagasta es que los enormes ingresos que se generan son un factor que empuja al alza los costos de vida, sobre todo si los mercados regionales no son capaces de alimentar esa mayor demanda", sostuvo el profesional.
Agregó que la región podría sufrir el síntoma de la enfermedad holandesa, que es la sobreexplotación de un recurso natural dejando de lado el desarrollo de otros sectores económicos.
Más ingresos
Para el académico y economista de la Universidad Católica del Norte, Jan Cademártori, es importante ver cómo se reparten los ingresos entre los grandes capitales que viven fuera de la región y quienes trabajan y residen de manera permanente en la zona.
"Hay un detalle importante que hay que preguntarse también y es qué pasará cuando se agoten los recursos naturales y estos resultados (PIB) ojalá no signifiquen que hay una sobreexplotación de ellos", dijo Cademártori.
Calidad de Vida
La directora ejecutiva de la Corporación de Desarrollo Productivo de Antofagasta, María Teresa Bustos, manifestó que aún falta mayor equidad en cuanto a los ingresos a nivel regional.
Destacó que si se analizan los indicadores económicos, sociales, de bienestar, sustentabilidad de las comunas que componen la región, sin duda, se puede afirmar que existe inequidad en el desarrollo territorial.
"Hay comunas "ganadoras" y "perdedoras" y en muchos aspectos, hemos repetido en la región la práctica de la excesiva centralización de las decisiones y recursos. A mi juicio, es imprescindible repensar la región desde una perspectiva más integral e integradora tal como lo propusimos en la Estrategia Regional de Desarrollo, donde la región reconoce a la persona como sujeto y objeto del progreso y para lograrlo requerimos de un gran acuerdo social entre todos los actores", concluyó la ejecutiva.