Por más de dos horas compareció ayer el excandidato presidencial Tomás Jocelyn-Holt ante la comisión parlamentaria que investiga las supuestas irregularidades en la recolección de firmas que posibilitaron su postulación.

El exdiputado pidió que su situación sea tratada en todas las instancias de manera distinta a la del otro indagado por hechos de este tipo, el economista Franco Parisi.

"Nuestro caso es muy distinto", planteó. "Con nosotros no se van a encontrar con un conjunto de personas con un mismo domicilio electoral", dijo ante los diputados.

"Tampoco con un charter que llegó desde Concepción a Renca con 2.000 personas", agregó. "Nosotros nos protegimos de que nuestros notarios no trabajaran fuera de su área jurisdiccional (...) Tampoco con notarios negando su firma (...) No se van a encontrar pagos de plata, nada", acusó.

Jocelyn-Holt auguró que Parisi no concurrirá a la indagatoria y pidió que la investigación política que se lleva a cabo no se sustente "con quienes colaboran". A su juicio, sería un "incentivo perverso terminar castigando a las personas que quieran colaborar" y añadió que ello sería cometer un "bullying parlamentario".

Hasta el momento, la fiscalía, la Corte de Apelaciones, la comisión de la Cámara y la Asociación de Notarios indagan posibles irregularidades en los procesos de ambas candidaturas.

La primera anomalía sería el supuesto incumplimiento de los jueces de legalizar personalmente cada uno de los respaldos, como exige la ley. También se indagan eventuales falsificaciones y uso de bases de datos públicas, como una del Ministerio de Vivienda y Urbanismo.

Jocelyn-Holt comenzó su presentación mostrando imágenes de prensa y blogs de recolección de firmas por parte del Partido Ecologista, Progresista e Igualdad para constituirse en colectividades. Lo mismo para impulsar las candidaturas presidenciales de Francisco Javier Errázuriz, José Piñera, Hernán Monckeberg y del diputado electo Giorgio Jackson. En ninguna de las fotografías había notarios ni representantes de esas entidades.

Para Jocelyn-Holt, es "imposible" que un ministro de fe presencie la recolección de más de 30.000 firmas. "Pretender que van a ir un día a una notaría no va a ocurrir", dijo.

Además, insistió en que la notaria cuestionada en su labor, Gloria Acharán, realizó el trabajo sin cobrar. "¿Por qué a mí o a ella le interesaría contaminar una base de datos?", se preguntó ante los diputados. Él insistió en que si se descubren irregularidades en ella sería porque un externo actuó maliciosamente.

Sobre la posibilidad de que fuera ingresada una base con una veintena de personas del Minvu, confidenció que una persona de su campaña participaba en un comité habitacional, adelantando que el antecedente será proporcionado al Ministerio Público. "Pero no hay un patrón (de irregularidades)", añadió.

El excandidato aseguró que él recopiló 59.000 firmas, de las que sólo ingresaron 44.000 al Servicio Electoral (Servel), pues su comando estableció a 80 personas a la revisión de todos los patrocinantes. Para ello, explicó que solicitaron la base de datos de ese organismo para cotejar domicilios electorales, que no hubieran firmado por otros postulantes, que no estuvieran muertos, tuvieran sus inscripciones vigentes o no pertenecieran a las Fuerzas Armadas.