Ciudad universitaria para Antofagasta
Los planteles de educación superior de la ciudad deberían trabajar por la promoción de la ciudad, superando la natural competencia individual.
Temuco cuenta con aproximadamente 47 mil estudiantes en educación superior; Concepción superó hace años las 100 mil y en Valparaíso la situación no es distinta: por cada diez porteños hay 1,7 jóvenes alumnos, considerando las alternativas universitarias, de institutos profesionales y de centros de formación técnica.
En Chile el crecimiento de educandos ha sido dramático y exitoso a partir de 1981, pero en especial durante los recientes lustros. En 2002 teníamos 520 mil educandos y hoy son 1 millón 100 mil.
Paso por paso podría decirse, ya que ningún plantel chileno está ubicado dentro de los 100 mejores del planeta. Recién ahora es cuando debe avanzarse en una calidad que está particularmente centrada en el Hemisferio Norte: entre Estados Unidos y Europa, con el Instituto Tecnológico de Massachusetts, Harvard y la Universidad de Cambridge, como estandartes.
En Antofagasta este desarrollo es aún incipiente. Los principales planteles son la Universidad Católica del Norte y la de Antofagasta, que aún tienen mucho camino por avanzar, junto a las no tradicionales, como Inacap, Santo Tomás, o Pedro de Valdivia.
Falta y bastante.
El punto es que la ciudad puede sobresalir no sólo en minería, turismo, o astronomía. La consolidación de un polo de educación es posible y hasta necesario considerando la inmejorable ubicación continental que tiene.
Estamos cerca del Perú, Bolivia, el norte argentino y hasta de Paraguay, Brasil, sin contar que desde La Serena hasta Arica, no existe una ciudad que tenga la oferta educativa de nuestra capital regional.
La posibilidad existe, pero hay muchas situaciones que solucionar: mejorar la calidad de nuestros planteles, dotar a Antofagasta de una infraestructura que permita ser atractiva para jóvenes de otras ciudades y países, y, ciertamente, corregir las distorsiones con los precios pagados en la ciudad.
La presencia de más estudiantes de educación superior en la ciudad, consolidando una "ciudad universitaria" es un bellísimo desafío.