Arriendos se disparan en últimos 20 años y sueldos sólo suben 10%
Por lejos Antofagasta posee los mejores indicadores económicos del país. Su PIB per cápita de US$34.000 (más de un millón y medio pesos) igual al de economías desarrolladas como Suiza o Inglaterra proyectan una imagen de la ciudad que para el resto del país, sin duda, es más que privilegiada. Aunque los ingresos reales de la región en los últimos 19 años sólo aumentaron un 10%.
El tema da para diferentes análisis, sólo el alto precio de la vivienda indica que para vivir en la ciudad hay que tener un sueldo considerable para sostener este costo. Claro que no toda la población vive de la minería, sólo un 20% de los antofagastinos tiene este privilegio y es ahí donde las dicotomías parecen ser más evidentes.
En este sentido el Instituto de Economía Aplicada Regional (Idear) de la Universidad Católica del Norte elaboró un estudio analizando los datos de la Encuesta de Caracterización Socio Económica Nacional (Casen), entre 1992 y 2011 el último informe disponible, que da cuenta del desarrollo de la región durante ese periodo.
Según el estudio efectivamente hay un crecimiento en los sueldos durante los últimos años, el cual aumentaría considerablemente sólo en dos años, entre 2009 y 2011 (justamente en el boom de la minería) a un 42%. No obstante, a pesar que existe un diferencia promedio de un 10% en los salariados durante el periodo analizado (1992 y 2011), ésta no ha sido estable durante las últimas dos décadas. De ahí surge la interrogante si realmente es en Antofagasta donde se gana más o si definitivamente ésta es la ciudad más cara del país.
El economista a cargo de la investigación, Dusan Paredes, explicó que si sólo se miran los datos concretos de la Casen se evidencia que sólo la mano de obra con calificación media baja posee salarios más altos en la región que en el resto del país. En particular, Antofagasta, presenta un aumento en los sueldos para este tipo de fuerza laboral de un 12% más que en la zona metropolitana.
También destaca que la mano de obra de calificación alta, no muestra diferencias significativas de sus ingresos comparando este indicador entre regiones.
"De lo anterior, sobresale que los aumentos en los salarios de la Región de Antofagasta son sólo síntomas de un choque exógeno, que específicamente se enfoca en el exceso de demanda de la mano de obra calificada media baja. Esto nos llama a poner énfasis en la inversión en grandes tecnologías, innovaciones y capacitaciones de los trabajadores, para poder controlar y distinguir el motivo de esta expansión", dijo el académico.
Paredes agrega que al mismo tiempo entre el 2000 y 2011, Magallanes presenta precios de vivienda un 15% mayor que la Región Metropolitana, mientras que este mismo indicador en Antofagasta es de un 12% por sobre Santiago. Ambas zonas presentan diferenciales de precios significativamente más altos que el resto del país. Por el contrario, Maule y Coquimbo tienen valores entre un 55% y 65% por debajo de la capital.
En este sentido el investigador subrayó que las inequidades regionales son y serán un punto vital de atención para la política pública local. A su juicio los salarios y precios juegan un rol fundamental al momento de analizar las disparidades de la zona. Desde ese punto de vista destacó que a pesar de su relevancia, Chile no se caracteriza por generar información fiable y constante sobre ambas variables claves.
"Indudablemente los precios afectan directamente el bienestar económico de los habitantes de Antofagasta. Más aún, y quizás más preocupante, ellos continuarán reflejando el ajuste de mercado y las esperanzas se deben situar en una disminución significativa de los costos. En este sentido, la política pública debe tomar un rol facilitador de información que permita a las personas contar con datos claros sobre la evolución de los precios regionales y así evitar en parte la llegada de trabajadores que vienen con una esperanza de ganar más y se encuentran con otra realidad, por ejemplo", acotó el economista.
El boom económico de Antofagasta ha sido materia de estudio en diversas oportunidades. Incluso la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) en septiembre de 2013 propuso más de 70 medidas para mejorar la calidad de vida. La primera ciudad chilena -y la segunda del mundo después de Chicago, EE.UU.- en la que el organismo realiza este tipo de diagnóstico específico.
Y los resultados fueron decidores pese a tener el ingreso per cápita más alto del país, que iguala al promedio de países de la OCDE, la calidad de vida no corresponde a esa realidad indicó el informe.
En esta materia la directora ejecutiva de la Corporación de Desarrollo Productivo, María Teresa Bustos, recalcó que para evaluar si la región tiene buenos niveles de calidad de vida debemos medir si existen buenas condiciones de vida "objetivas" junto a un alto grado de bienestar "subjetivo" que se reflejen finalmente en la satisfacción de las necesidades colectivas e individuales. "En ese contexto falta mucho por avanzar".
"En relación al acceso a mejores ingresos, debemos entregar a nuestros niños y jóvenes mejor educación para que sean capaces de integrarse al mercado con mayor capacidad de innovar y diversificar" concluyó la ejecutiva.
12%
más caro son los arriendos en Antofagasta comparado con Santiago, aunque Magallanes tiene índices aún más elevados.
2011
fue el año donde los sueldos presentaron el mayor crecimiento de 42%, claro que esa tendencia no se mantuvo en el tiempo.
Para el secretario ejecutivo de Ciudad Modelo, Rodolfo Ugarte, el costo de vida en Antofagasta tiene que ser analizado también desde un punto de vista macro, o sea lo que cuesta desplazarse desde la zona norte al centro de la ciudad, o las comodidades que hay (áreas verdes, servicios), entre otros puntos. "Es urgente promover la renovación urbana para generar una oferta inmobiliaria potente, Hoy el plan regulador limita ciertas decisiones", dijo Ugarte.