La Reina cumplió su promesa y sorprendió al mostrar su cuerpo sólo decorado con pintura
En el lanzamiento oficial de su candidatura, Sigrid Alegría había adelantado a la prensa que "los espero en el piscinazo sin ropa", aunque nadie lo tomó tan en serio. Sin embargo, tal vez fue esa rara promesa la que inclinó la balanza a su favor, convirtiéndose en la soberana 2014, tras lo cual ratificó que haría un piscinazo sin tela. La gran duda era, ¿lo cumpliría?
Eran las 10 horas de ayer y los alrededores de la piscina del hotel O'Higgins ya eran copados por cientos de reporteros gráficos, camarógrafos y periodistas que esperaban ansiosos el anhelado instante, a pesar que faltaban dos horas para que se cumpliera con el ritual. La mañana viñamarina -como es habitual durante el mes de febrero- transcurría entre la brisa marina y el cielo nublado, poniendo aún más dudas respecto a si la actriz se atrevería a mostrarse desnuda. Era tanta la expectación que hasta el matinal "Bienvenidos" alargó su emisión hasta las 13 horas.
Con 40 minutos de retraso de la hora estipulada, y mostrando una belleza deslumbrante, Sigrid Alegría hizo su aparición. Al ingresar al sector de la piscina, vestía un chaquetón de color gris que cubría parte de la propuesta artística que luciría frente al público presente y que le fue prestado por la exsoberana Tonka Tomicic.
Tras sacarse el abrigo, la protagonista de "Mamá mechona" dejó a todos los presentes con la boca y los ojos bien abiertos: había cumplido su promesa. La actriz dejó de lado los bikinis y mostró una faceta mucho más artística que las reinas de años anteriores, luciendo un diseño pintado a su cuerpo que, acorde a sus armoniosas curvas, entregaba un cuadro perfecto mezcla de sensualidad y fineza.
Los aplausos y silbidos invadieron el O'Higgins y, antes de lanzarse a la piscina, la pelirroja posó ante las cámaras, inmortalizando un momento histórico en el Festival de Viña, ya que por primera vez una Reina se quita toda la ropa en la culminación del certamen. De esta forma, la actriz marcó un hito en la Ciudad Jardín, superando con creces a sus antecesoras.
Alegría solo pudo compartir con la prensa acreditada dentro de la piscina durante exactos 7 minutos, ya que posterior a eso el maquillaje utilizado comenzaría su proceso de disolución y se debía evitar un bochorno que opacara la impecable jornada. Al despedirse, la Reina fue ovacionada y aprovechó la oportunidad para reiterar los agradecimientos a cada uno de sus votantes.
El que también resultó ganador de la jornada fue el programa "Bievenidos", que era uno de los que representaba la flamante nueva Reina.