Aunque fue duramente criticado por ser un afuerino, el gobernador de la Provincia de Tocopilla, Sergio Carvajal, salió al paso de los comentarios argumentando que como nortino no es ajeno a las demandas de la Segunda Región.

Nacido en Antofagasta y militante del Partido Comunista, la joven autoridad provincial (31 años) manifestó conocer muy de cerca las necesidades de la población, por el hecho de vivir en un territorio donde los problemas son transversales a cada comuna. En esta entrevista, el gobernador de la Provincia de Tocopilla habla acerca de los desafíos y su plan de trabajo, pero además de su empatía con los movimientos sociales, a quienes no detendrá si estiman conveniente manifestarse por sus demandas.

¿Cómo se siente luego de ser nombrado gobernador?

-Me siento extraordinariamente bien, es un desafío muy significativo dada la importancia que tiene la ciudad de Tocopilla, sus provincias y su historia. Sabemos que es un pueblo muy marginado por las decisiones que se toman a nivel central.

¿Esperaba ser designado?

-Hubo claramente una propuesta de mi partido y costó formularla. Aunque fueron varios intentos por dar a conocer mi nombre en Santiago, este último fue bien recibido por la autoridad central. De todas formas la designación fue sorpresiva para mí y para los mismos tocopillanos que no sabían quién venía a asumir las funciones acá.

¿Qué opina de las críticas hacia usted por no ser tocopillano?

-Aquí no se trata de un afuerino que viene a imponer la línea central, sino que de un nortino, con apego a su tierra, que viene a reivindicar las demandas sociales de Tocopilla. Mi objetivo es que estos requerimientos sean comprendidos por la capital regional y también acogidos por el Gobierno central.

¿Cómo es su relación con el alcalde Fernando San Román (PRO)?

-En Chile estamos en un proceso de transición a una nueva política, donde hay rostros viejos y nuevos (…) Pero también hay un nuevo actor, que viene desde el mundo social. Fernando San Román viene de ese mundo. En mi caso fui dirigente universitario, he tenido participación en política juvenil y, por lo tanto, desde el mundo social cuento con una experiencia que la llevo ahora al mundo político.

Bajo el contexto de las manifestaciones en Tocopilla, ¿de qué manera será su relación con los movimientos sociales?

-No vamos a sofocar una manifestación en la medida que sea legítima, es decir, que tenga el respaldo amplio de la ciudadanía. Además, que ésta no genere daños en la propiedad pública y privada (…) Este va a ser un gobierno amigo del mundo social, que tienda la mano y que hará todo lo posible para dar solución a los problemas que afectan a los ciudadanos, interpretando lo que ha sido el parecer de la Presidenta Michelle Bachelet.

¿Habrá mayor fiscalización a las empresas?

-Habrá que hacer todos los esfuerzos para fiscalizar, ver cuáles son los mecanismos de mitigación que poseen las empresas, las medidas paliativas en cuanto al borde costero. Esto, debido a que se generan bastantes consecuencias en el desarrollo de otras actividades y que afectan a la salud de quienes habitamos en la comuna.

¿Qué sucederá con la reconstrucción?

-Más allá de lo que queda pendiente respecto a la reconstrucción de Tocopilla, también debemos apuntar al estado de avance del proceso y ver que efectivamente estos cumplan con estándares de calidad, para que nuestros habitantes puedan vivir de buena forma.

En agosto de 2013 Tocopilla vivió una protesta que hizo eco a nivel nacional. Aunque los vecinos de esa comuna se manifestaron solicitando mejores condiciones de vida, éstos fueron reprimidos fuertemente por Carabineros. En esa ocasión, el alcalde San Román criticó el accionar del Gobierno Regional. Al respecto, el gobernador Cesar Carvajal dijo "Cómo un Gobierno puede reprimir ese tipo de reivindicaciones, cómo un Gobierno puede ser un enemigo de ese tipo de demandas (...) mi rol es abrir puertas, extender una mano amiga al movimiento social, de anera que sus demandas puedan ser resueltas lo más pronto.