"Entre paréntesis"
Leer a Bolaño es una cosa, tratar de conocerlo es otra y muy distinta. Sólo nos queda esa especie de archivo histórico a través de sus entrevistas, comentarios y anécdotas de quienes lo conocieron. Tal vez para los más expertos, ir descifrando a través de su obra el tránsito por la literatura, el arte.
Para otros puede resultar algo más simple, basta con revisar internet y encontraremos incluso información a símiles de soundtracks que el autor hubiese armado si continuara vivo. Sabemos, por ejemplo, que le gustaba Violeta Parra, Chick Corea, AC/DC, Marc Bolan.
Sabemos de su partner Mario Santiago, su movimiento, el infrarrealismo. De su álter ego, Arturo Belano. Sabemos de Carmen Pérez de Vega, su última compañera hasta morir. Incluso enterarnos que en sus últimos meses de vida seguía el reality show español Gran Hermano. Y, así, un sinfín de cosas que nos entregan datos de quien fue el escritor chileno Roberto Bolaño.
"Entre paréntesis" amalgama un paseo por sus textos y un acercarse a una especie de autobiografía. El libro es póstumo, editado por su amigo Ignacio Echeverría. Contiene discursos, columnas de opinión y artículos periodísticos que escribió entre 1998 y 2003.
Devela las sensaciones en hitos importantes para la vida del autor, como cuando recibió el Premio Rómulo Gallegos: su relación literaria con otros autores; su regreso a Chile.
Bolaño siempre fue sarcástico, crítico, se burlaba de sí mismo y de los demás, divagaba y hacía anotaciones mentales para su literatura todo el tiempo. Sólo podemos imaginarlo.
Seguramente aún nos vería con extrañeza, ajenos, como lo describe en el libro tras su regreso a Chile después de un largo tiempo "Y de golpe aparecieron los rostros chilenos, los rostros de mi infancia y adolescencia, por todos lados, en catarata, rodeado de chilenos, chilenos que parecía chilenos, chilenos que parecían marcianos?"
"Entre paréntesis" justamente lleva a la pausa, a preguntarse ¿Cómo sería Bolaño en el Chile de hoy, en el mundo de hoy?