En pleno desierto y listo para ser detonado, un asistente de geólogo encontró un proyectil militar que habría sido abandonado hace unos 40 años cerca de la localidad de Baquedano, munición que fue destruida por personal especializado de Carabineros.
El hallazgo lo realizó un trabajador de 33 años, quien presta servicios a una compañía de exploraciones mineras en la región. El asistente analizaba terrenos en el sector de Sierra Jardín, unos cinco kilómetros al sur oriente de la ruta B-385.
Mientras recorría esta zona, el trabajador encontró un objeto en la superficie, el que de inmediato reconoció como un proyectil militar. Minutos más tarde llegó hasta la Tenencia de Carabineros de Baquedano, donde informó el hallazgo. Al tratarse de un artefacto explosivo, los funcionarios dieron aviso al Grupo de Operaciones Policiales Especiales (Gope).
La unidad, a cargo del capitán Pedro Vargas, inspeccionó el sitio y el objeto, certificando que éste llevaba varios años abandonado en el desierto.
El capitán sostuvo que su estimación es que el proyectil permanece en pleno desierto desde la década del 70. Pero lo más peligroso, agregó, es que el explosivo estaba activo. Es decir, cualquier golpe en sus elementos podía terminar en una explosión.
'El artefacto no tenía ningún número de serie o lote. Se trata de un proyectil de artillería de unos 75 milímetros de diámetro y 50 centímetros de largo', precisó el capitán del Gope.
El objeto, según detalló Vargas, tenía como objetivo ser utilizado para maniobras de prueba en cañones sin retroceso, durante ejercicios militares.
Tras verificar que la carga activa presentaba eventual peligro en su traslado, los funcionarios especializados decidieron realizar la destrucción en el mismo lugar del hallazgo. Este procedimiento es parte del protocolo de la policía.
Como estaban en medio del desierto sin ninguna vivienda cercana ni tránsito de personas o vehículos, no tuvieron problemas para ejecutar la detonación.
Lo que hizo el Gope fue instalar una carga explosiva controlada en el artefacto, lo que aseguró un estallido completo. A esto sigue la elaboración del informe por parte del personal Carabineros.
El documento debe detallar las características del objeto y cómo fue encontrado. La información será enviada al Ministerio Público, para que investigue la procedencia del proyectil y bajo qué circunstancias fue abandonado en el desierto.
Aunque estos datos podrían ser difíciles de conseguir, debido a la antigüedad de la munición y que no poseía un número de serie.