El peso de la historia
En la literatura chilena de la zona Norte varias fechas merecen consideración aunque en los textos especializados de hoy, por alguna razón casi nada se ha dicho al respecto. La literatura es un fluir y quienes gustan de ella han de estar atentos a su fluencia para avalar la formulación de juicios.
El hecho expuesto, se presta para especulaciones y hasta desconcierta al lector común. Sin embargo, como hito remoto para el tema, baste decir que la escritora argentina Juana Manuela Gorriti (1818-1892) siendo joven, dejó interesantes páginas literarias de su permanencia en Cobija.
En el plano, a veces difuso, de los antecedentes, siempre hay algo más. Testimonios de simples prosas descriptivas, legadas por viajeros y científicos que alguna vez estuvieron en estas tierras son bastante conocidos.
Entre otros, Therese von Bayern; Alejandro Bertrand, Francisco de Paula Martínez y Sáez, Atanasio Hernández (1830), quien en viaje de La Paz a Cobija, se refirió a Calama en estos términos, según Fernando Cajías, en su texto La provincia de Atacama:
'De Chiuchiu a Calama hay 6 leguas, y su camino es corriente. Calama es un medio de Valle formado por el río que lo baña; mas a pesar de la abundancia de terrenos que podrían cultivarse, los naturales se contentan con pastorear sus Ganados en la Gran Dehesa que forma la campiña.
Los habitantes son pocos, y los más dedicados a la arriería de burros. Calama es la escala indispensable, y un depósito de los cargamentos que salen del Puerto. Toda carga que sale de él va a entregarse a Calama porque los arrieros no hacen más que este flete. Los interesados toman nuevos arrieros en este punto para transportar sus fardos al interior, y es por tanto que Calama siempre se considerará como la primera etapa de este tránsito'.
La zona Norte chilena, en el tránsito de los siglos XIX y XX, temprano dispuso de algunas 'obras literarias' de sello nacional. Éstas, que son parte de la historia, tuvieron una relativa difusión.