Monckeberg: 'El objetivo final es llegar a La Moneda'
traspaso. Ayer se realizó el cambio de mando en RN. Carlos Larraín afirmó que no aceptará 'giros a la izquierda'.
MARIBEL FORNEROD / AGENCIAUNO
En la sede del Congreso en Santiago asumió ayer la nueva directiva de Renovación Nacional. El evento estuvo marcado por la ceremonia de cambio de mando, en donde Carlos Larraín hizo entrega de la presidencia al nuevo timonel, Cristián Monckeberg.
El nuevo presidente de RN recalcó que buscará lograr la 'paz interna' en la colectividad y de esta manera frenar el éxodo de militantes, además de apuntar hacia el centro político, pese a su alianza con la UDI.
'Yo espero tener la mejor relación con la UDI, pero también entendiendo que la unidad es importante, muchas veces pensamos distinto y que no es drama debatir y tener matices y estrategias distintas', sostuvo Monckeberg, según consignó radio Cooperativa.
Uno de los principales objetivos de Renovación Nacional. además de solucionar los conflictos internos y fijar distancias con el actual Gobierno, es configurar el camino hacia las próximas elecciones presidenciales de 2017.
En declaraciones a 24 Horas, Monckeberg aseguró que 'hay muy buen ambiente en el partido y eso da cuenta de que estamos de nuevo de pie'.
'Vamos a trabajar fuertemente en el objetivo final, que es llegar a La Moneda, pero eso significa un tremendo trabajo', señaló.
Finalmente, el nuevo presidente de RN llamó a 'recuperar la confianza de la ciudadanía en este nuevo rol opositor', donde buscarán ser capaces de 'conversar con el Gobierno, llegar a acuerdos, pero también ser duros fiscalizadores cuando se hagan mal las cosas'.
Antes de dejar el cargo y fiel a su estilo, Carlos Larraín pronunció un discurso metafórico acerca de las reformas propuestas por el actual Gobierno.
'Nosotros como partido debemos afrontar lo que yo creo se puede resumir en un ataque triple. Esta es un arma con tres puntas la que esgrime hoy día el Gobierno de la Nueva Mayoría, lo que antes se llamaba un tridente, que se reservaba para Neptuno, el dios de los océanos. Ahora también lo esgrimen las sirenas, no sé si con la misma eficacia. Pero yo veo que hay un embate muy fuerte contra todas las cosas que nosotros respetamos', sentenció el ahora ex presidente de la colectividad, en referencia a los temas más fuertes del debate político: las reformas tributaria y constitucional y la despenalización del aborto.
Larraín realizó una alocución en que criticó los cambios que se quieren implantar al interior del partido y que terminó con el retiro de militantes.
'Hay personas que quisieran transformar a Renovación Nacional en un partido de izquierda. Se equivocarían rotundamente. Hay una amplia variedad de partidos de izquierda, para todos los gustos habidos y por haber. Nosotros no pertenecemos a esa definición doctrinaria y práctica', expreso el ex parlamentario.
Larraín dijo tener 'gran confianza' en la nueva directiva y calificó como 'poco probable' que haya un giro a la izquierda con esta formación.
'Los que quieran eso, pues que se vayan a uno de los cinco, seis u ocho partidos de izquierda que hay ahora (…) pero si nos cambian el partido yo sería uno de los primeros en irme, y vaya que me costaría. Yo creo que es poco probable que esto ocurra, porque ustedes van a tener una directiva de lujo, encabezada por gente que tiene una trayectoria clara, que sabe dónde quiere que ir', expresó.
Al igual que Monckeberg, Larraín fue categórico a la hora de criticar las reformas del Gobierno, sobre todo las medidas en el ámbito de la educación.
'Ustedes han seguido la discusión sobre el tema educacional y sobre el financiamiento, y fíjense que estas personas que quieren hacerse cargo de la educación parece que no supieran sumar, porque quieren recaudar mediante una reforma tributaria ocho mil millones de dólares, esto en el supuesto en que no cambie ninguno de los supuestos subyacentes, que pueden cambiar', enfatizó el ahora ex presidente de Renovación Nacional.