Argentina se clasificó en Brasil 2014 a una final del Mundial por primera vez en 24 años. Será la quinta de su historia y el rival un viejo conocido: Alemania. La misma selección con la que ya se enfrentó en dos ocasiones en la definición del certamen.

La primera fue en 1986 y la albiceleste de la mano de un gigante Diego Maradona conquistó su último título planetario.

Fue un partidazo. Argentina comenzó ganando por 2-0 pero los alemanes reaccionaron llegando a la igualdad.

El duelo se definiría a seis minutos para el final y un gol de Burruchaga sellaría la victoria argentina.

Cuatro años más tarde los europeos tendrían su revancha. En un partido mucho más apretado que el jugado en México un gol de Andreas Brehme desnivelaría el duelo en favor de los alemanes.

Ese sería hasta hoy su último trofeo.

En la otra vereda, el revés argentino se convirtió en el segundo en una final mundialista y el primero desde Uruguay 1930, cuando fue superado por los locales por 4-2. Los sudamericanos no volverían otra vez a una final hasta hoy.

La albiceleste buscará su tercera corona. Alemania irá por la cuarta. Ambos desnivelarán una rivalidad que hasta ahora sigue igualada con un triunfo para cada equipo.

Arjen Robben perdió quizás la oportundidad de disputar su última final del Mundo. No pudo.

La eliminación ante Argentina limitó a Holanda al partido por el tercer puesto y el astro deberá observar desde afuera la definición del campeonato.

Pese a ello, igual el jugador del Bayern Munich no quedó ajenó a los pronósticos de quien levantará la Copa el próximo domingo en el Maracaná y ya definió un candidato.

'No tengo dudas que será Alemania. Argentina no tiene ninguna chance de ganar', aseguró el holandés.

Robben no desconoce que el dolor por no llegar hasta ahí por segundo Mundial consecutivo es fuerte y lamentó la ajustada eliminación frente a los trasandinos en Sao Paulo.

'Duele mucho no llegar a la final. Es muy decepcionante. Es muy complicado dar una opinión del torneo porque estoy muy decepcionado. Hemos estado cerca', agregó.

Pese a ello, el delantero valoró lo hecho por su selección en el Mundial y prefirió no adelantar detalles sobre su futuro. 'Estoy muy orgulloso de este equipo porque es muy joven. Igual no es el momento de hablar de lo que viene'.

La histórica goleada de Alemania a Brasil en Belo Horizonte (7-1) pudo ser mucho peor. Según aseguró el defensa alemán Matts Humels, su selección pactó en el entretiempo no humillar a los locales.

La historia. Los europeos derrotaban por 5-0 a Brasil tras la primera mitad y aseguraban su lugar en la final del torneo. No era necesario más goles.

'Se tiene que demostrar respeto al oponente, y era muy importante que nosotros lo hiciésemos. No tratamos de mostrar un poco de magia o algo así. Era importante que jugarámos nuestro juego durante 90 minutos', declaró el zaguero al Daily Mirror.

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