Las tres aristas que muestran el mal momento que vive D. Antofagasta
dos bandos. La administración y la disidencia se muestran como dos entes irreconciliables mientras el equipo es colista.
Caló hondo la entrevista de Harold Mayne-Nicholls publicada ayer en El Mercurio de Antofagasta. En ella, el expresidente de la ANFP se refirió sin contratiempos ni excusas al duro presente deportivo e institucional que vive actualmente Club Deportes Antofagasta.
Múltiples muestras de apoyo tuvieron las palabras del exdirigente, quien se refirió a los temas que la hinchada 'Puma' tiene dudas como cuándo será la elección de la nueva directiva tal como lo determinó un tribunal.
Fueron sus respuestas lo que tocó el alma de los antofagastinos adherentes al equipo, según se pudo constatar en terreno.
Esto se ve con que ya no van a ver al equipo cuando juega de local. Hablando sólo de este Torneo de Apertura de la temporada 2014-2015, fueron 1.500 hinchas cuando el CDA enfrentó a Audax Italiano (0-0) y contra la 'U' (0-3) el Estadio Regional se tiñó de azul.
La sensación que se palpa en el ambiente es que muy pocos se identifican con el club.
El problema, tal como lo afirman algunos, habría comenzado cuando la directiva que preside el CDA corporativo Osciel Guzmán vendió el club y Jorge Sánchez aceptó el modo y las condiciones.
La disidencia opina que sería bueno para los colores albiceleste, que Deportes Antofagasta se transforme en un club-institución y deje de ser sólo un equipo de fútbol que, además, no tiene sede, menos una cancha dónde entrenar.
Queda patente este punto con tener que, plantel y cuerpo técnico, 'gitanear' para preparar los partidos debido a a la falta de un recinto deportivo propio.