'Pensar fuera de la caja'
La frase es un cliché, sin duda. Sobre todo cuando se habla de innovación y creatividad, el concepto de 'pensar fuera de la caja' salta como resorte desde la lengua de quienes a través de esta expresión quieren decir que para enfrentar cualquier desafió o problema hay que pensar distinto a como lo veníamos haciendo. Pero qué es la famosa caja… qué simboliza… qué significa. Primero que nada habría que preguntarse ¿Cómo visualizo yo esa caja cuando escucho la mentada frasecita?' En otras palabras… ¿Pienso fuera de la caja cuando pienso en la caja?
En mi caso, la caja es de esas cajas de embalaje, de cartón y de color 'caja de cartón'. No hay nada de 'afuerino' en la caja que se me viene a la mente, porque finalmente la caja representa los límites dentro de los que me muevo, lo conocido, lo habitual, lo ya explorado, lo que alguna vez estuvo fuera de la caja, pero que con el tiempo se ha convertido en parte de la caja también. Porque en ese sentido, la caja se va expandiendo en la medida que vamos poniendo en práctica el concepto de 'pensar fuera de la caja' y que nuestras neuronas van haciendo nuevas conexiones.
Entonces, tiene su chiste la famosa caja. Y el ejercicio de pensar más allá de sus confines nos potencia y nos permite ser más de lo que ya somos, en un proceso interminable, e infinito. Como el Universo mismo, que también se expande y se ha venido expandiendo desde siempre, desde el Big Bang, o desde antes, quién sabe. Pero hoy todos los científicos concuerdan que el Universo es más de lo que nunca fue. Pero es menos de lo que será mañana.
Lo mismo pasa con nosotros como individuos y como sociedad. Por eso es importante dar paseos fuera de la caja de vez en cuando, o mejor aún si es bien seguido y cada rato. Aunque dé susto, aunque dé vértigo, aunque te sientas tonto y ridículo y raro y… distinto. Porque ¡bingo! ahí está la gracia, creo yo, que cada uno se atreva a ser más de lo que es. 'Pensar fuera de la caja' es una invitación no sólo para ser más creativo, sino para ser más creador. Y digo creador en el más grandilocuente sentido de la palabra: creador de mi vida, de mi realidad, de mi sociedad, de mi destino. La caja es la plataforma, sus paredes son el umbral y lo que hay fuera de ella es pura potencialidad.