La Isapre Banmédica tuvo que desembolsar una suma de $400 millones hacia tres clínicas de Antofagasta por las prestaciones de Marisol Reyes, quien estuvo en coma durante 6 meses por una presunta negligencia médica tras dos operaciones (de manga y baipás gástrico).
Según el padre de la paciente (quien aún se encuentra hospitalizada, esta vez, en la Clínica Dávila en Santiago), Juan Reyes, en un primer momento esta isapre no habría accedido a pagar la suma de dinero a los centros asistenciales privados La Portada, Hospital Militar y Clínica Antofagasta, aludiendo a que no se trataba de una urgencia médica, ya que ella había accedido voluntariamente a la cirugía.
Superintendencia
Banmédica se habría negado a otorgar el beneficio CAEC (Cobertura Adicional por Enfermedades Catastróficas), a pesar de que complicaciones posteriores a la operación pusieron en riesgo vital a Marisol Reyes. La familia de la antofagastina concurrió hasta la Superintendencia de Salud para interponer la denuncia.
Luego de llevar a cabo un procedimiento arbitral, la Superintendencia ordenó a la isapre asumir el pago a través de la Ley de Urgencia por las atenciones hacia Marisol.
'La isapre presentó todos los recursos disponibles, pero el tribunal los rechazó en todas las instancias', explicó Juan Reyes, el padre de la afectada.
Incluso Reyes agrega que, si bien fue un alivio el fallo de la Superintendencia de Salud, ese dinero igual se le cobrará a su hija cuando comience a trabajar.
'Como familia de clase media era imposible asumir todo el pago para las atenciones de mi hija. Sin embargo, igual la deuda es de cargo de la afiliada, ya que el mecanismo de la Ley de Urgencia le permite pagar esta deuda en cuotas calculada sobre sus remuneraciones. Por lo tanto, la isapre igual le va a cobrar esa plata a Marisol, a través del tiempo', precisó Reyes.
secuelas
El padre sostiene que su hija aún no puede superar las graves secuelas que le produjo la esta intervención, 'por lo que seguiremos hasta agotar todas las instancias judiciales para que las instituciones y profesionales médicos respondan por tan lamentable proceder', agregó.
La operación de manga gástrica que se realizó Marisol en 2012, generó una infección. Una semana después se le efectuó otra cirugía, para reparar la primera, esta vez de baipás gástrico. Marisol no presentó mejoría.
Pasaron las horas y por recomendación de otros médicos, los padres decidieron cambiar a Marisol de hospital. Llegaron a la Clínica Antofagasta y el equipo de profesionales le practicó una cirugía de 'salvataje', como le indicaron a su familia.
Seis meses estuvo en el centro asistencial, con un coma inducido. Al pabellón entró más de 40 veces y sobrevivió a dos paros cardiorrespiratorios.
El abogado defensor de la familia, Francisco Leppes, explicó que Juan Reyes siempre se sintió 'apoyado por la Superintendencia de Salud'. Para el jurista, el próximo paso a seguir es interponer una querella criminal y una demanda civil en contra del médico cirujano que supuestamente cometió la negligencia, Carlos Olivares.
'La idea es que responda por su negligencia médica. No es posible que un doctor que no tiene la especialidad esté operando. Vamos a ir a Tribunales y hacer justicia', argumentó.