La Presidenta Michelle Bachelet entregó su más absoluto respaldo a los ministros de Hacienda y Educación, quienes llevan adelante dos importantes reformas del programa de gobierno de la Nueva Mayoría, aunque con evidentes problemas en la puesta en marcha, diseño y respaldo a los proyectos.

Bachelet salió a poner la calma cuando algunas señales daban por cierto algunos cambios en el gabinete, sobre todo después de la encuesta Adimark donde quedó en evidencia una caída en el apoyo a la mandataria, pero también a las reformas que lleva adelante la actual administración política

Este punto tiene algo inquietos a los analistas del oficialismo, porque las reformas tributaria y a la educación gozaban de un alto respaldo de la ciudadanía, pero ahora poco a poco están perdiendo simpatías, sobre todo en los sectores de clase media.

El tema es más profundo. Esta pérdida de apoyo, tarde o temprano, afectará al sector político gobernante, ya sea en las próximas elecciones o al momento de elegir sus figuras para las presidenciales del 2017.

Sin duda, con estas reformas, la Nueva Mayoría apuesta parte importante de su capital electoral, que incluso llega ahora hasta el Partido Comunista, que entró a la alianza de gobierno con más críticas que aplausos de la izquierda tradicional. Además sus figuras también poco a poco pierden respaldo como es el caso de la diputada Camila Vallejos, otrora líder absoluta en las mediciones.

En una entrevista dominical, el senador Andrés Allamand advirtió que desde el Gobierno pronto vendría una especie de 'golpe de timón', porque el ministro Nicolás Eyzaguirre aún no puede echar a andar la reforma a la educación. No habló de cambios en el gabinete, sino más bien cambios de orientación en las políticas de gobierno.

Bachelet dio entonces la señal. Entregó su más rotundo respaldo a Eyzaguirre y al ministro de Hacienda en una semana complicada para sus respectivas carteras, aunque todo está por verse en sus próximas jugadas para sostener sus tareas.

Septiembre es un mes de conmemoraciones más que de celebraciones. Cuando todavía recordamos los días grises de un 11 de septiembre, y lo que derivó en una época difícil y triste de nuestra historia, una semana después debemos celebrar el 18 nuestra independencia, que no es otra cosa que el recuerdo de la esperanza o el sueño de los primeros chilenos por un país con más justicia y libertad.

'Antofagasta tiene una de las mayores complejidades para construir viviendas'.

'Hay que terminar con el binominal en todo Chile y no solamente en algunas regiones'.