En los próximos años el norte de Chile podría concentrar el 70% de la observación astronómica mundial de concretarse los proyectos anunciados en el sector. Las inmejorables condiciones climáticas del desierto de Atacama facilitaron la llegada a la región de inversiones que bordean los US$2 mil millones y la zona ya es reconocida como "los ojos del mundo".

Antofagasta es una región privilegiada para la observación del cosmos, esa es la razón por la que grandes observatorios como Paranal o ALMA decidieron instalarse en la zona y también futuros megaproyectos como E-ELT pronto serán una realidad.

El astrónomo del Instituto de Astronomía de la Universidad Católica del Norte, Christian Moni Bidin, comentó que "se estima que al 2020 Chile concentrará más del 70% de la capacidad de observación astronómica desde la Tierra. De esa fracción una parte importante está ubicada en Antofagasta, por lo que la región es lejos el lugar con más proyecciones en esta materia a nivel mundial", aseguró.

Según profesional, la instalación de los grandes centros astronómicos en la región la convirtieron en la capital mundial de la astronomía.

Investigación

Coincide con esa visión Eduardo Unda-Sanzana, director de la Unidad de Astronomía de la Universidad de Antofagasta (UA), quien comentó que "el futuro se ve muy auspicioso. No solamente están instalados grandes centros de investigación extranjeros, sino que ahora hay una contraparte local más clara y potente del mundo universitario, empresarial y político".

Explicó que la UA asumió dos proyectos de naturaleza emblemática: El primer Observatorio Astronómico estatal y el primer Centro de Astroingeniería fuera de Santiago. "Hace algunos años era impensable hacer esta clase de propuestas, pero nos dedicamos a hacer una gestión muy intensa, de a poco aunando voluntades de numerosos actores clave, y hoy podemos hablar de iniciativas casi 100% financiadas. Esto saca a la región de las gradas para por fin pisar la cancha; la idea es dejar de ser espectadores para de una vez ya hacer que la región sea parte protagónica de estos desarrollos", aseguró.

temas pendientes

Sin embargo, un tema que parece pendiente es el aporte de estos observatorios a la región y sus investigadores. "Las relaciones de Chile con los grandes observatorios ocurren a nivel central, generalmente sin participación de las regiones en los cuerpos de negociación. Esto ha dado pie a que no haya una política clara de colaboración entre los observatorios y las universidades de las regiones en que éstos se instalan", explica.

"Más que un aporte regional, estos centros tienen un gran aporte a todos los astrónomos trabajando en instituciones chilenas a través de la reserva del 10% del tiempo de observación (en nuevos telescopios un 5% estará condicionado a la colaboración con socios europeos)", complementó Maximiliano Moyano, astrónomo de la UCN.

Aportes

En este reportaje los astrónomos y académicos del Instituto de Astronomía de la Universidad Católica del Norte, Christian Moni Bidin y Maximiliano Moyano, hicieron una selección de los principales aportes al conocimiento mundial de los observatorios instalados en la región.

Respecto de cuál es el principal descubrimiento astronómico de los observatorios asentados en la zona, ambos coincidieron en que: "Si bien es cierto que en ciencia existen descubrimientos que cambian el paradigma o nueva tecnología que abre las puertas a nuevas áreas, el conocimiento es en general gracias a muchos aportes, es decir nuevas ideas o técnicas nacen de todo lo que se sabe hasta ese momento. Considerando lo anterior, de la lista presentada el que nos parece más interesante es el número uno ("Imagen revolucionaria de ALMA revela génesis Planetaria") por sus implicancias en las teorías de formación de planetas".