El miembro de la Corte de Apelaciones de Santiago, ministro Jorge Dahm Oyarzún, estuvo a mitad de semana en Antofagasta participando del "Taller Reflexión sobre Gobierno Judicial", donde se recogen opiniones de los funcionarios del Poder Judicial de todo el país, con miras a una reforma de dicha institución.
El abogado de la Universidad de Chile y con extensa trayectoria en tribunales, recorre las distintas jurisdicciones como director técnico del Programa de Fortalecimiento, realizando sondeos y comparando la realidad chilena con la experiencia de otros países.
La idea elaborar una propuesta que eventualmente será discutida con los otros poderes del Estado, para definir el curso del gobierno judicial. Dahm además se refirió al sistema de carrera de los jueces, la carga laboral de los tribunales y la mayor demanda de justicia por parte de la ciudadanía.
consultoría
¿En qué consiste la consultoría del llamado gobierno judicial?
-El gobierno judicial es la manera en que el Poder Judicial dirige el rumbo de la justicia. Esto tiene muchas aristas, que van desde cómo se representa este gobierno, también desde el área de la jurisdicción y la gestión de los procesos para que los ciudadanos tengan una rápida respuesta de la justicia. Todo esto es dirigido para dar un mejor servicio a la comunidad.
¿Qué es lo que gatilla esta consultoría?
-La estructura y la forma del Poder Judicial tienen muchísima antigüedad, por lo que es necesario hacer cambios para responder con eficiencias a las necesidades de la comunidad. La concentración de poder es demasiado grande, todo está concentrado en la Corte Suprema, donde se cruza lo jurisdiccional con la gestión, junto a temas disciplinarios, de carrera, capacitación y calificación. Esto es mucho poder en manos de pocas personas y hoy estos sistemas ya no resisten más porque son ineficientes.
Y respecto a esto, ¿qué piden hoy los jueces?
-Reclaman cada días más independencia y un modo de hacer carrera o desplazarse en los distintos puestos judiciales. También apuntan a las calificaciones, que obedecen a patrones que antiguamente sirvieron, pero que hoy no dan resultados porque los énfasis en la gestión son otros. Por eso lo que se pretende es hacer una reflexión interna para ver cuál es la mejor manera en que nos podemos gobernar. Pero esto no quiere decir que lo pensemos es lo que se realizará, ya que requiere de reformas legales y constitucionales, respecto de las cuales nosotros no participamos. Lo importante es que cuando venga la discusión de los planteamientos de gobierno, nosotros tengamos una posición.
carrera judicial
¿Cómo es actualmente la carrera de los magistrados?
-Un juez en la universidad obtiene sus conocimientos básicos (Derecho) y luego ejerce, donde la práctica influye mucho. Necesitamos de un sistema que permita ascender o cambiar de puestos con menor carga laboral a otros con una mayor o de más complejidad, pero sin que este proceso signifique que el profesional deba trasladarse de ciudad.
Hoy tenemos muchos jueces de primera instancia, en comparación a los ministros de la Corte de Apelaciones que son pocos, y de la Suprema que son mucho menos. Por eso, decirle a una persona que entra al Poder Judicial, usted podría ser presidente de la Corte Suprema, es extremadamente baja. Esto lleva a que un juez pueda estar muchos años en el mismo puesto, y para que este magistrado permanezca y no se vaya, hay que dar incentivos, lo que se llama la carrera horizontal.
¿Qué es la carrera horizontal?
-Por ejemplo, participar de la gestión, de capacitaciones si al juez le gusta la docencia o de seguir perfeccionándose, a medida que este desarrollo se alcanza, puede traducirse en una banda de sueldos que no esté unida al cargo. Aunque de momento éstas son solo ideas.
¿Cómo ven las cargas laborales de los tribunales en el país?
-Ese es un tema en el que hay que tomar medidas, ya que se trata de diseños teóricos, de cálculos o estimaciones de cargas de trabajo que tendrá una ciudad o región. Sin embargo, la realidad muchas veces no es esa, y puede ocurrir que exista sobre o infradotación. Habría que modificar la ley para que permita mover jueces donde haya menos carga a lugares donde están sobrecargados.
denuncias
También tiene que ver con que la ciudadanía está demandando más justicia en tribunales…
-La ciudadanía tiene nuevos derechos, por ejemplo el Sernac, que ha crecido enormemente. Antes si una persona compraba un producto y no le funcionaba, se quejaba con el vendedor y nada más. Pero las personas van al Sernac, hacen denuncias que van a parar a los tribunales. Estos cambios generan más carga laboral, lo mismo que pasa en los recursos contra las isapres. En Santiago hoy se reciben entre dos y tres mil recursos de protección mensuales de este tipo, que se convirtió en un trámite muy administrativo.
Un ejemplo de eso lo tuvimos en la ciudad, donde se recurrió a los juzgados por un proyecto minero que involucra un galpón para almacenar concentrado de cobre en pleno centro de la ciudad.
-Eso es producto de este nuevo ciudadano más empoderado y consciente de sus derechos. Al tener más conocimiento de estas materias, reclama cuando siente que son vulnerados. Estos casos se judicializan porque no hay instancias intermedias de solución, en el caso del galpón, lo lógico era que se resolviera por la autoridad sanitaria, pero por la razón que sea no sucedió y terminó todo en tribunales.