un estudio asegura que cerrar los ojos estimula la memoria
salud
Las personas suelen olvidar ciertos detalles debido al ajetreo de la vida cotidiana. Cuando es necesario buscar información en la memoria, a veces se pierde la concentración. Sin embargo, el mejor remedio puede ser tan simple como cerrar los ojos.
Así lo afirma un estudio desarrollado por un equipo de la Universidad de Surrey, en Reino Unido. Desde la perspectiva de la criminalística, los autores afirman que los testigos presenciales de este tipo de hechos aportan detalles más precisos cuando mantienen sus ojos cerrados.
El estudio contó con la participación de 178 personas en dos experimentos.
En primer lugar, los investigadores hicieron que los voluntarios vieran una película sobre un robo. Después, cada participante tuvo que responder a una serie de preguntas relacionadas con el contenido audiovisual que habían observado. Algunos de los participantes cerraron sus ojos para contestar.
Los autores descubrieron que los participantes que habían cerrado los ojos respondieron correctamente a un 23% más de respuestas, en comparación a quienes contestaron con los ojos abiertos.
En el segundo experimento, los participantes vieron un programa de TV donde se reconstruía un crimen en el que un anciano había sufrido un robo en su casa. Los resultados de la entrevista posterior revelaron que, una vez, más, cerrar los ojos para recordar ayudó a una mejor reconstrucción de los detalles del suceso y a que los sujetos se sintieran más cómodos a la hora de responder a las preguntas.
"De nuestra investigación se desprende que cerrar los ojos ayuda a la construcción de relaciones con el recuerdo de los testigos. Además, establecer una relación de antemano con los testigos, esto es, hacer que estén más a gusto, es vital si queremos animar a los testigos a utilizar esta útil técnica durante las entrevistas", afirma Robert Nash, líder del estudio.
importancia del sueño
Una de las causantes de los problemas de memoria es la falta de sueño. Por ello cobra importancia dormir entre seis y ocho horas diarias para tener un mejor desempeño cognitivo.
Un estudio de la Universidad de California indica que aquellos que se ven privados de sueño son más propensos a recordar detalles falsos en comparación a aquellos que han dormido bien.
"¿Envejecer? ¿Por qué tengo que pensar en eso, si soy joven todavía?"Quizás sea eso lo que muchos se preguntan. Pero, te puedo decir que recientemente una señora me hizo pensar en ese tema.
Cuando me bajé del trolley en la estación Palomar St. y seguí por la calle, una señora me ofreció una revista. Yo seguí de largo, pero unos segundos después, me paré y me pregunté: "¿Por qué estará ella aquí? Volví y empezamos a hablar por un buen rato, y ella me contó mucho de su vida. Se ha mudado de Tijuana hace unos años ya, y la mayor parte de su familia vive allí mismo en Chula Vista. Aunque tiene pases para trolleys y buses, no los utiliza, porque prefiere caminar. Camina por todo el barrio, todos los días, a todas partes. Cuando le pregunté si no se cansaba, me dijo: "Claro que no. Me quedo mucho afuera, a veces llego a las 7 de la noche, a veces a las 10." Pero no come nada en la calle, todo lo cocina ella misma. Y no toma ninguna medicina. Nunca ha tenido una operación y hace poco se fue al médico para un chequeo, y se constató que está totalmente sana. Cuando le pregunté su edad, me dijo 81 años, pero no aparentaba tener más de 65! "¿A qué se debe su salud de hierro?", le pregunté yo. "A Dios", me contestó ella. Como estudia mucho la Biblia, aprendió a poner en práctica sus enseñanzas. Por ejemplo, hace unos años estaba muy triste por lo que le había hecho una hija. Ella y los otros hijos se sentían traicionados. Pero las enseñanzas bíblicas le ayudaron a perdonar. Hoy vive muy feliz, sin rencor, sin odio ni resentimiento, y habla normalmente con su hija.
Como bien muestra ese ejemplo de mi nueva amiga, la actividad física, la buena alimentación, los buenos sentimientos y la felicidad solo pueden contribuir al bienestar, ¡pero ella misma atribuye su salud a la presencia constante de Dios que siente en su vida!
Muchos estudios muestran cuán importante es el tema. Por ejemplo, los doctores Howard Friedman y Leslie Martin en su libro The Longevity Project [El Proyecto Longevidad] cuentan los resultados de sus investigaciones de más de 20 años. Ellos descubrieron que las personas más felices son más sanas, pero no por las razones que uno imagina. El análisis meticuloso de la vida de 1,500 personas les abrió nuevas ideas para entender la estrecha relación entre la salud y la felicidad. Ellos tienen sugerencias para que uno cultive no solo "una larga vida, sino también una vida exitosa, significativa y productiva".
Para mí, además de esos ejemplos, es muy importante vivir satisfecho con uno mismo y concentrarse en el "ahora". O sea, no preocuparse tanto por el pasado o por el futuro, sino buscar la satisfacción y la excelencia en lo que uno hace hoy. Puede ser entonces que la vejez, en verdad, no sea parte de tus preocupaciones, pues todos los días de tu vida estarás sano y feliz.
Metodología
Los investigadores de la Universidad de Surrey realizaron el estudio desde un punto de vista criminalístico, basándose en los interrogatorios policiales.
Resultados
Los autores del estudio concluyeron que la técnica de cerrar los ojos ayuda a la construcción de relaciones con el recuerdo de los testigos.
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Columna
* Maestra y conferenciante de la Ciencia Cristiana. Escribe sobre temas de salud desde un punto de vista espiritual. Columnista de The Huffington Post.