Antofagasta
Antofagasta cumple oficialmente 136 años, tomando como fecha de aniversario su anexión al territorio chileno un 14 de febrero de 1879, fecha de inicio de la Guerra del Pacífico. Digo "oficialmente" porque el poblamiento había comenzado antes. Eso es por mayoría sabido; lo que no muchos saben es el origen del nombre de nuestra ciudad, aunque sobre ello no hay consenso.
Cierto, no existe claridad sobre el origen y significado del término "Antofagasta". Una teoría postula que viene del Cacán, que era la lengua diaguita del noroeste argentino y, según Ricardo Latcham (arqueólogo y antropólogo inglés-chileno) también del norte chico de Chile. De este dialecto vendría la conjunción de "anto" (o "hattun") que significa "grande", "faya" (o "haya") que significa "salar", y "gasta" (o "kasta") que significa "pueblo"; "Antofayagasta", "Pueblo del salar grande".
Otra teoría postula que viene de la deformación lingüística de "Antapakay", palabra del dialecto quechua. De este dialecto tenemos "anta" que significa "cobre" y "pakay" que corresponde a "esconder"; por consiguiente, ese término quechua significaría "Escondrijo de cobre".
Otra postura teórica le asigna al nombre al término "Antofagasti" ("Puerta del sol") con que los changos denominaban a nuestro hermoso monumento natural La Portada.
Por último, se cree que la ciudad fue denominada así por el presidente boliviano Mariano Melgarejo quien en 1870 la renombró con el actual nombre en honor a una estancia que él poseía en Antofagasta de la Sierra, pueblo del noroeste argentino.
Sea cual sea el origen del nombre de nuestra ciudad, ojalá todos la quisiéramos, tanto los que nacimos aquí como los que han llegado de otras latitudes y la han hecho su casa. Digo ojalá porque al parecer, algunos, por sus acciones como el botar basura a diestra y siniestra en cualquier parte, y otros de cuello y corbata que no siempre toman las mejores decisiones político-administrativas para ella, lo único que demuestran es no quererla como se merece.