Figueroa define titulares con doble disposición táctica para el domingo
Cobreloa. Luciano Palos, Rodolfo González y Eric Ahumada fueron confirmados por MAF entre el "11" que saldrá a buscar un triunfo ante San Marcos para continuar con vida en el torneo.
Recién en la práctica de esta mañana, Marco Antonio Figueroa ratificará lo que hoy prácticamente quedó asentado.
Un 3-4-1-2 para hacerle frente a San Marcos de Arica en el choque de mañana en la cancha del Luis Becerra Constanzo. Es decir, un equipo ofensivo en el papel, pero que con un par de movimientos estratégicos cambia el tablero a un esquema más "conservador" sin recurrir a la banca.
En efecto, con el reingreso del portero Luciano Palos en la portería, la última línea nuevamente vuelve a los tres defensores, aunque allí será fundamental el trabajo de los dos laterales volantes: Ignacio Herrera y Rodolfo González, quienes tendrán la labor de marcar la subida de Claudio Jopia y Pablo "Mota" González, respectivamente.
Fue precisamente Herrera quien comentó el trabajo que tendrá que asumir en el choque ante el sublíder del torneo. "Hace varios partidos que vengo jugando así, uno se desgasta más pero también sabe que la altura y el desgaste físico hace que los laterales de ellos muchas veces la piensen antes de mandarse. Y si bien uno tiene que seguirlos hasta la mitad de la cancha, si se mandan hay que cubrirlos no más. Por eso, a veces la gente cree que uno está muy atrás porque lo ven como delantero neto".
"Nacho" se sumó al llamado de sus compañeros en la semana, pidiendo que la hinchada loína se sume y apoye en estos momentos tan complejos. "La gente debe saber que nosotros los entendemos más que nadie, que sabemos que lo pasan mal y nosotros mismos vivimos en una constante preocupación. Si nos ven con optimismo pese al lugar en que estamos es porque somos los únicos que podemos dar vuelta esta situación y por ello tenemos que darnos ánimo, creer que se puede. Pero claro, en estos momentos necesitamos del hincha, que hagan sentir al equipo rival más visitante que nunca. Eso nos puede ayudar".
revancha
En Arica se recuerda constantemente la fatídica última fecha del torneo 85-85, en que "los zorros" llegaron hasta el Carlos Dittborn para ganarles dos a uno, levantar la copa de campeón y de paso, mandar a "Los Bravos" a la Primera B. Y hay una especie de sed de revancha, aunque sólo a nivel de hinchadas.
Porque fue el defensor ariqueño, Carlos Labrín quien aseguró que "nosotros no estábamos para esa época y lo que está en la historia se respeta, pero no juega. Queremos ir, ganar en Calama, seguir sumando puntos para escaparnos de cualquier peligro de descenso y si eso les complica a ellos, no será por culpa de este partido nada más".
Lo mismo piensa Ignacio Herrera. "La historia está ahí, los equipos hoy son muy distintos y nosotros estamos en la obligación de ganar porque es un rival directo, no por mantener números o estadísticas. Ese tipo de detalles le da más sabor a los partidos y uno lo entiende. Las rivalidades entre los equipos del norte están más que claras, pero en ningún caso este partido significa algo respecto a esa fecha".