El Sename está a la espera de la notificación judicial que le permita realizar una evaluación siquiátrica, iniciar un tratamiento y mantener la vigilancia del adolescente de 15 años, quien fue formalizado por el delito de lesiones graves contra su expolola. Esta última, permanece internada en el Hospital Regional, luego de dar a luz a su hija de manera prematura por la agresión.
El menor fue imputado el domingo pasado en el Tribunal de Garantía, hasta donde llegó detenido por la golpiza que propinó a su expolola de 16 años, quien tenía 37 semanas de embarazo. El magistrado determinó durante la audiencia que el acusado tiene prohibición absoluta de acercarse a la víctima y además dispuso que quedara bajo la supervisión del Sename.
A través de un oficio, el tribunal envió la notificación de la medida al coordinador judicial del Sename y a la Subcomisaría Norte de Carabineros. Se dispuso la Letra b del artículo 155 del Código Penal, lo que implica que el imputado queda bajo la vigilancia de una institución determinada por el juez, al que deberá enviar informes de manera periódica.
programas
El director regional del Sename, Patricio Reyes, explicó que lo primero que deberán realizar con el menor cuando reciban la notificación, es someterlo a una evaluación siquiátrica en un Centro de Salud Mental (Cosam).
"Dependiendo del diagnóstico podemos derivarlo a alguno de los programas de intervención que tenemos, como por ejemplo, un PRM (Programa de Reparación de Maltrato), dijo Reyes.
De hecho, agregó, ya recopilaron antecedentes sobre el imputado, como información familiar y otros datos que servirán para comenzar a trabajar. El director regional precisó que estos casos caen en una categoría especial contemplada legalmente. Es decir, si los programas del Sename están al máximo de su capacidad, pueden incluirlo igualmente.
"Estas intervenciones son lideradas por distintos profesionales y se ejecutan de manera ambulatoria, no en un régimen cerrado. Además, este trabajo también está enfocado a sus padres o hermanos, al círculo en el que se desarrolla el menor", sostuvo Reyes.
Respecto de la adolescente de 16 años y su hija, el equipo jurídico del Sename interpondrá esta mañana un recurso de protección en el Juzgado de Familia. La idea es que el servicio pueda cautelar los derechos de ambas víctimas y tener un seguimiento del proceso de recuperación.
La joven madre ingresó ayer al Centro de Apoyo a Víctimas de Delitos Violentos (CAV). Junto con trabajar en el daño sicológico que sufrió la menor, el centro deberá poner énfasis en el hecho de que no quiso reconocer a su expololo como quien la agredió.
recuperación
Según las estadísticas del servicio de menores, una víctima de violencia intrafamiliar o en la pareja, tarda en promedio unos siete años en reconocer a su pareja como agresor, ya sea en violencia física, sicológica o económica.
La víctima habría mejorado bastante su condición e incluso trascendió que hoy podría recibir el alta médica. Su hija, que nació prematura con 37 semanas, seguiría en el área de Maternidad del Hospital Regional.
Exite la posibilidad de que los padres de la agredida puedan solicitar la custodia de la recién nacida en Juzgado de Familia, si consideran que ésta tendría dificultades para mantener a la niña.
La golpiza fue descubierta en el mismo recinto médico, cuando el imputado y su madre dejaron a la adolescente de 16 años en la Urgencia. La embarazada presentaba una serie de lesiones en el rostro y brazos, donde incluso los médicos detectaron una mordedura humana.
Tanto el expololo como su madre explicaron que las lesiones fueron ocasionadas por una caída en la ducha, pero se excusaron para salir del recinto a estacionar su vehículo, y no regresaron más a acompañar a la víctima.
Los médicos determinaron que la vida del feto corría peligro considerando el daño físico de la madre, por lo que resolvieron realizar una cesárea de urgencia. Tras la intervención, la paciente fue sometida a un coma farmacológico y conectada a ventilación mecánica en la UCI.
Desde el hospital dieron aviso a los familiares de la menor de 16 años, quienes acudieron hasta Carabineros para estampar una denuncia.
El expololo fue detenido por la policía y puesto a disposición del Tribunal de Garantía. La prohibición de acercarse a la víctima también fue notificada al Hospital Regional, en caso de que el agresor quisiera acudir al recinto.
La medida cautelar también incluye cualquier tipo de contacto, ya sea a través de redes sociales, por llamadas telefónicas o hasta mensajes de texto.