El ministro de Hacienda, Alberto Arenas, dijo ayer que espera que la economía "continúe recuperando gradualmente su dinamismo" y llegue a alcanzar una tasa de crecimiento de "alrededor de 3% este año".

Al participar en la 5th Annual BBVA Latin America Conference, que culmina hoy en Nueva York, el secretario de Estado afirmó que entre los factores que justifican un "cauto optimismo" sobre la actividad de este año están un posible mejoramiento del crecimiento mundial, lo que podría redundar en una demanda algo más fuerte de los socios comerciales; la flexibilidad del tipo de cambio, que ha permitido que el peso se deprecie más del 10% real desde 2013 y permita que sectores transables ganen competitividad; la política monetaria expansiva y la política fiscal contracíclica.

"El Presupuesto para este año contempla una expansión del gasto del 9,8%, dirigida principalmente a la inversión pública, que se espera que crezca 27,5% este año", añadió el ministro en un comunicado.

Arenas agregó que el que gran parte del crecimiento del gasto público se concentre en inversión implica que el estímulo fiscal podría retirarse con facilidad, lo que facilita la convergencia del déficit estructural sin imponer ajustes costosos para la economía.

Durante su exposición, Arenas afirmó que la economía chilena ha enfrentado un ajuste macroeconómico que se reflejó en una pronunciada desaceleración, la que según él se deriva principalmente de factores externos y del deterioro del precio del cobre.

recuperación gradual

El año pasado, la economía creció 1,9% "y tocó fondo en el tercer trimestre, en el que el crecimiento fue de 1%. Desde entonces inició una gradual recuperación. En el último trimestre de 2014 registró 1,8% y en el primer trimestre de este año la expansión promedió 2,2%", agregó el jefe de la Hacienda pública.

El ministro consignó que la caída de los términos de intercambio, junto con el proceso de estrechamiento de la Reserva Federal y la política monetaria expansiva en Chile llevaron a una depreciación sustancial del peso. Destacó que -pese a esto- el ajuste de la economía a las nuevas condiciones externas "ha sido saludable".

"El déficit por cuenta corriente, que era una preocupación hasta hace un año, ha disminuido sustancialmente. El año pasado el déficit alcanzó el 1,2% del PIB, y para este año se espera una cuenta corriente equilibrada", comentó en su intervención. Como elementos dinamizadores de la inversión extranjera, Arenas agregó que se han firmado nuevos tratados de doble tributación, el más importante con China, y "tenemos un fuerte compromiso con el proceso de acuerdo de la Asociación Trans-Pacífico (TPP)".