El Fondo Monetario Internacional declara a Grecia oficialmente "en mora"
crisis. Atenas acudió a una cláusula especial del organismo, que abriría la puerta a una moratoria que va de tres a cinco años. Sin embargo, desde el mismo Gobierno le pidieron al primer ministro que acepte el plan de los acreedores.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) confirmó ayer que Grecia no efectuó el pago de los 1.600 millones de euros adeudados al organismo y declaró al país "en mora", mientras el viceprimer ministro, Yanis Dragasakis, afirmó que Atenas pidió al FMI aplazar el pago del préstamo.
La situación implica que el país solo puede recibir más financiamiento de ese organismo una vez que se ponga al día en el pago de ese préstamo.
Los ministros de Finanzas de la Zona Euro se negaron a darle a Grecia una extensión de último minuto al programa de rescate, y Atenas no pudo reunir dinero por su cuenta para pagar al FMI. Según AP, el organismo "consideraría" la petición de Grecia para prorrogar el crédito. El último país que incumplió pagos fue Zimbabue (2001).
medidas excepcionales
Poco antes de la oficialización de la deuda, el viceprimer ministro, Yanis Dragasakis, reconoció que aconsejó al primer ministro, Alexis Tsipras, aceptar la propuesta de acuerdo de las instituciones.
De esta forma, Grecia utiliza una disposición de los estatutos del FMI que permite que un Estado miembro pida -sin votación necesaria- aplazar la fecha de un reembolso entre tres y cinco años, lo que corresponde a la duración de sus préstamos.
"Existe la posibilidad de pagar al FMI más tarde", dijo Dragasakis en una entrevista en la televisión pública, en la que explicó que el Ejecutivo de Alexis Tsipras solicitó retrasar el pago del préstamo por unos 1.600 millones de euros hasta noviembre.
Grecia tenía ayer plazo para efectuar este desembolso que agrupa tres pagos de junio; de lo contrario, entraría en estado de mora de sus deudas frente a este organismo monetario internacional.
Dragasakis agregó también que aconsejó a Tsipras aceptar la propuesta de acuerdo de las instituciones, y dejó entrever que de ser así, el Gobierno podría cancelar la celebración del referéndum del próximo domingo.
"Le sugerí a Alexis Tsipras aceptar la propuesta de las instituciones", aseveró el viceprimer ministro citado por la agencia EFE, aludiendo a la ruptura de las negociaciones entre Grecia y los socios que se produjo después de que el Gobierno no aceptase el plan propuesto por el Eurogrupo .
Dragasakis dejó entrever que de lograrse un compromiso, el Ejecutivo podría cancelar la consulta.
"Es posible que el Gobierno decida otra cosa, se trata de un tema político, lo convocamos (el referendo) para obtener un acuerdo", señaló.
nueva propuesta
Grecia vivió ayer un segundo día de control de capitales: los bancos cerraron y los griegos solo podían sacar 60 euros de los cajeros automáticos.
Atenas pidió ayer a la Zona Euro un tercer programa de créditos por 29.000 millones de euros que regiría hasta 2017 y sería operado a través del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE). Pero el Eurogrupo descartó la propuesta.
Las noticias provenientes de Grecia remecieron al mercado local. Por ejemplo, el dólar terminó la sesión de ayer con un alza de $4,30 respecto al cierre del viernes, y bordeó los $640. La divisa norteamericana se cotizó en puntas de $639,50 vendedor y $639,00 comprador, en su nivel más alto desde el 18 de marzo pasado ($642,70). La moneda estadounidense finalizó el mes con ganancias de $21,30. El precio del cobre también resintió la jornada y terminó de cotizarse con una baja de 0,80% en la Bolsa de Metales de Londres (LME), al transarse en US$2,59500 la libra contado "grado A". La Bolsa de Santiago cerró al alza de 0,40%.