Antofagastinos 'sufrieron' por efecto de agua con lacrimógeno
disturbios. Carabineros utilizó un carro lanza agua para dispersar a hinchas que provocaban desórdenes en celebración del triunfo de Chile en la Plaza Colón.
Simplemente no se podía respirar sin sentir alguna molestia. Ardor en los ojos, garganta y nariz fueron los síntomas que evidenciaron los antofagastinos que transitaban o que trabajan en las cercanías de la Plaza Colón, y que fueron afectados ayer por el efecto de un líquido lacrimógeno.
El origen del aire irrespirable se debió a la intervención que hizo Carabineros para dispersar a quienes, en la Plaza Colón, se reunieron para celebrar el triunfo de Chile ante Perú. El alboroto era tal, que se decidió lanzar agua mezclada con líquido lacrimógeno.
Sin embargo, ayer cuando la ciudad comenzó con su actividad normal, los transeúntes y gente que trabaja en las cercanías de la plaza, comenzaron a experimentar una serie de molestias. Hasta pasadas las cinco de la tarde aún era posible advertir el aire enrarecido.
Incluso algunos locales y establecimientos del centro debieron interrumpir sus actividades, ya que se hacía insoportable respirar y trabajar con normalidad.
Atención
Por ejemplo, servicios como Fonasa o el Arzobispado debieron suspendieron su atención habitual.
De acuerdo a lo explicado por el prefecto de Carabineros de Antofagasta, coronel Robert Morales, se reunieron cerca de 500 personas a celebrar el triunfo de la 'Roja' y cientos de ellos protagonizaron desorden, intentando subir al odeón de la Plaza Colón.
Megáfonos
A través de megáfonos se les dijo que despejaran el lugar, pero los hinchas respondieron lanzando botellas. Ante eso, Carabineros utilizó el carro lanza agua para dispersarlos.
"Ocupamos el lanza agua en forma gradual, primero sólo con agua y como éstos persistían en el desorden, se ocupó agua mezclada con líquido lacrimógeno. Esto está dentro de toda norma y fueron seis mil litros de agua con 1,5 litros de lacrimógeno, lo cual es bastante débil y es distinto a lo que se ocupa en otras ciudades como Santiago, donde es más fuerte", acotó Morales.
La celebración terminó pasada la medianoche con ocho detenidos por desórdenes, uno por robo con sorpresa, uno por conducir en estado de ebriedad, tres por beber licor en la calle y dos por encontrarse en estado de ebriedad en la vía pública.
Dijo además que para la final del sábado esperar contar con mayor dotación de funcionarios policiales, debido a que lamentablemente antisociales echan a perder la celebración.
La comunidad en tanto espera que no se repita la misma molesta situación.