El intendente Valentín Volta piensa unos segundos cuando se le pregunta por qué será recordada su gestión... y entonces responde que es mejorar la calidad de vida de las ciudades, reduciendo las evidentes brechas y déficit que existen.

Hace 15 meses, cuando asumió el cargo en reemplazo de Waldo Mora sus palabras no fueron distintas. "Nuestra zona es rica y es pobre, tenemos que ver cómo en conjunto logramos equiparar, especialmente para los sectores más vulnerables", dijo ya sentado en el sillón de jefe regional.

Desde entonces han pasado muchas cosas, incluyendo su ratificación en el cargo. Volta hoy está de vacaciones junto a sus hijos y aunque en rigor ha dejado de ir a la Intendencia, sigue contestando llamados, conectándose directamente con La Moneda y consciente que en cualquier minuto podría volver al edificio de calle Prat.

Así han sido los, probablemente, meses más intensos del falangista.

¿Cómo toma la ratificación del cargo?

-Lo tomo contento, tranquilo y desafiado por la Presidenta. Contento porque inicié procesos que quiero darles continuidad; tranquilo por cumplir el mandato de la Presidenta y desafiado porque este es un segundo tiempo, donde le daremos continuidad a algunas cosas y replantearnos otras. Agregaremos una agenda pro crecimiento, un modelo de gestión multisectorial, que permita, en el marco de la ley, agilizar la inversión privada.

Debemos tener más de 50 mil millones en proyectos y estamos trabajando en eso con el equipo económico.

El foco es, entonces, mejorar la inversión privada.

-Así es. En el primer mandato fue la inversión pública y en eso anduvimos muy bien. Con un protocolo y un equipo que ha andado excelente. Eso es lo mismo que queremos hacer ahora. Entre minería, construcción, turismo, superamos los US$60 mil millones al 2018 y esta región está llamada a ser líder, a ser locomotora y no carro. De hecho, el 14% del PIB nacional se produce acá.

¿Qué le piden concretamente?, porque la llave de inversión no la tiene el intendente. Se trata de cuestiones de política nacional.

-Más que el intendente es el gobierno en la región. Aquí está todo lo que tiene que ver con permisos sectoriales y agilizarlos, entre otros.

Cuando uno mira dónde está detenida la inversión privada en Chile, damos cuenta que es en el sector minero, productivo y básicamente por conflictos ambientales.

-En eso esperamos ser un facilitador con las comunidades. Tenemos, por ejemplo, experiencias y espacios de diálogo y confianza con los pueblos originarios que nos interesa desarrollar en beneficio de las comunidades y del desarrollo productivo, siempre en el marco de la ley. En esto nos interesa avanzar.

No se asume por el gobierno central que buena parte del resultado económico que tenemos hoy tiene que ver con decisiones que causaron efectos. La reforma tributaria, educacional, laboral y el clima de incertidumbre general.

-El crecimiento económico del país tuvo un declive el segundo semestre de 2013, en el gobierno del Presidente Piñera. Ahora bien, yo diría que lo que ha enrarecido el ambiente son los actos ilícitos entre negocios y política, entre empresarios y políticos. No creo que fueran las reformas que fueron anunciadas y desarrolladas oportunamente.

A propósito de ese tema, ¿cuál es su juicio respecto del presente del país?

-Es lamentable porque no todos los políticos, ni lo público, ni todo lo privado tienen estas prácticas. Nuestro país no es reconocido por la corrupción, sino por la probidad, transparencia, entonces es una mala noticia para el país, con efectos en la democracia. Lo rechazo categóricamente. Me da la impresión que la codicia es un tema demasiado complejo… Querer siempre más.

¿Y cuando estos casos se dan en su coalición… qué le ocurre?

-Peor aún porque hemos entendido, casi por estereotipo, que la Alianza representa los intereses empresariales y la Nueva Mayoría, no. Sigo creyendo que no es así, por eso lo rechazo. Valoro al mundo privado, pero cada uno en su mundo, no se puede cruzar la política y los negocios.

TEMA PORTUARIO

Volta no lo dice, pero es uno de los principales interesados a seguir como intendente, una vez que el cargo sea democratizado. Al mismo tiempo, reconoce que la posibilidad de elegir al jefe regional está cada vez más entrampada.

En todo caso, confirma que le gustaría terminar en el cargo junto a Bachelet y no optar por una carrera a algún puesto de elección popular.

Hoy existe una situación pendiente -reposición- respecto del galpón que deberá resolverse. El proyecto no podría operar, según la interpretación que hace el SEA. ¿Cómo se vincula esto, con el pedido del gobierno central de promover la inversión privada?

-En el marco de la ley. Se resolverá en ese contexto. Hoy estamos en un recurso de reposición, está pendiente lo que ha hecho el Municipio por los 50 metros, pero todo se dará conforme a la ley.

¿Este caso tiene un simbolismo especial?

-Para mí no. Lo importante es que lo que resuelva la institucionalidad ambiental quede claro para el resto de la industria minera y lo que resuelva será apegado a la ley.

¿Qué le gustaría que pasara?

-Sólo espero que la institucionalidad se pronuncie.

Cuando ATI dice que es un "error" y expone una tabla donde se da cuenta que si hubiese un problema este se produciría a partir del año 21, según lo precisado en la DIA…

-Los abogados y técnicos resolverán si este es o no un error. No soy yo quien tiene que resolverlo, ni me voy a pronunciar.

La ministra de Salud planteó que todo el Puerto podría presentarse a evaluación ambiental. ¿Están de acuerdo con eso?

-Lo conversamos antes y después. Ahora, la autoridad competente es Medio Ambiente y lo están resolviendo a ese nivel, porque además debiera hacerse extensivo a todos los puertos de Chile. Pero a mí me parece que sí, que debiera, por DIA o EIA, estar calificado todo el puerto en todas sus operaciones. La relación puerto- ciudad supone el ámbito medioambiental.

Todas las medidas anunciadas, por ejemplo, cargas en container, apuntan a minimizar los impactos, no se ha pensado en sacar las cargas definitivamente. ¿En qué momento se desechó esa posibilidad?

-Eso se desechó en el gobierno del Presidente Sebastián Piñera cuando por medio de una DIA se autorizó este proyecto (de Sierra Gorda SCM y ATI). Incluso Codelco avanzó y no sacó más graneles por acá. Los gobiernos de los presidentes Eduardo Frei y Ricardo Lagos plantearon que el puerto granelero debiera ser Mejillones y es el Presidente Piñera el que autoriza este proyecto.

¿Es imposible sacar las cargas hoy?

-En lo inmediato estamos con la idea de emisiones cero. Cero acopio y la tecnología que estamos estudiando así lo garantiza. Pasar de la carga, directo al embarque.

¿Qué pasa con los otros impactos? Camiones, ruido, tren.

-En lo que al gobierno le compete, nos hacemos cargo y el privado también se tendrá que hacer cargo.

DÉFICIT DE LA REGIÓN

Volta reconoce las brechas y temas pendientes que tienen especialmente Antofagasta y Calama, como temas prioritarios. Ejemplifica con las obras realizadas en distintas quebradas de la capital regional que impiden la ocurrencia de aluviones devastadores, pero que se concentraron bajo el gobierno del exintendente Jorge Molina (período de Ricardo Lagos).

"¿Pero qué se hizo durante el resto del tiempo?", se pregunta.

¿A quién le traspasa esa responsabilidad?

-A los municipios, a los ejecutivos de la época. Cuando hablo de la deuda del Estado, me refiero a esto. Y no sólo es en recursos porque es fácil decir falta plata, pero hay que gestionar los recursos que se tienen. Nosotros aumentamos los presupuestos, sin marchas, ni protestas, hemos hecho una buena gestión.

Antofagasta es una región que entrega mucho al país y los informes oficiales dan cuenta que llega muy poco. Uno entiende que buena parte de los déficit de la región y más puntualmente de Antofagasta y Calama tienen que ver con el abandono de lo público. ¿Coincide que aquí hay una deuda?

-Creo y pienso que el Estado, el ejecutivo, legisladores, municipios, han tenido muy abandonada la región, pese a la importancia económica y geopolítica que tiene. Nosotros estamos haciendo esfuerzos por revertir esto. Tal vez el mejor ejemplo de lo anterior es que ya tenemos el quinto presupuesto más importante del país.

Pronto queremos pedir una reunión con el ministro del Interior (Jorge Burgos), junto a los alcaldes para ver cómo obtenemos más recursos y retornos a propósito de los recursos que aquí se generan. Por cierto, será a través de la tarea legislativa, entonces estamos comprometidos en esto.

¿Cuál es el sello de su gestión?

-Disminuir las brechas en el desarrollo de las ciudades. Tenemos ciudades con bolsos de pobreza y opulencia, localidades que no tienen luz, agua, alcantarillado y sin embargo tenemos chárter de mineros que se les paga todo para venir a trabajar. Eso mismo se ve en el desarrollo urbano. No es posible tener esta ciudad en estas condiciones de aseo. No resiste análisis. Necesitamos hablar de ciudades modernas, con mejor y más equipamiento urbano.

¿Qué ha sido lo más complejo, o qué haría de nuevo?

-Mejoraría algunas cosas, mis equipos. Espero empezar a hacer más relaciones políticas, he sido cuestionado por eso, aunque discrepo que dedicado a lo técnico y al gasto, no hago política. Tal vez hacer algunos giros en mi agenda, trabajar más cara a cara con la gente. Con los alcaldes trabajo bien, salvo una excepción y bien con los parlamentarios. Pero no me arrepiento de nada.

¿Los cambios se harán cuándo?

-No está claro. Lo estamos viendo.