Fósiles de 150 millones de años yacen escondidos en la región
CIENCIA. Área cercana a Calama es la más rica para los paleontólogos.
Una riqueza escondida entre rocas fósiles posee la Región de Antofagasta, donde aún es posible encontrar rastros de la gran variedad de dinosaurios que habitaron el territorio, hace más de 150 millones de años.
De hecho, la zona de Calama es actualmente es una de las áreas paleontológicas más importantes y sede de una de las mayores colecciones del país, como es la que posee el Museo de Historia Natural de la Corporación de Cultura y Turismo de Calama (CCTC).
Allí es posible encontrar más de mil piezas de vestigios fósiles encontrados en sectores como Yalquincha y las quebradas ubicadas en Ojo Opache y Río Salado.
"Mucha gente ve a los dinosaurios como algo lejano, pero no es así, tuvimos en nuestro territorio muchas de esas formas animadas que poblaron los mares y continentes hace millones de años. Y estos dinosaurios han estado presentes en distintos periodos geológicos de la Tierra, encontrando en Calama distintas manifestaciones de la vida del Jurásico, el Triásico, el Cretásico y Pleistoceno", comentó el director de Museos de la CCTC, Osvaldo Rojas.
Sectores
Un sector rico en restos fósiles es "Cerros Bayos", donde se han descubierto ictiosauros, animales de cierto parecido a los delfines actuales.
"Ellos eran reptiles modificados que volvieron al mar y que tenían cuatro aletas que corresponden a la mutación de sus patas", precisó el director de Museos de la CCTC.
Los plesiosaurios también se encontraban en este sector de cerros. Éstos existieron en los mares jurásicos hace más de 150 millones de años.
Otro extintos habitantes de la zona son los pteranodones. En otras partes del mundo estos reptiles voladores llegaron a medir hasta 5 metros con sus alas extendidas, pero en la región sólo medían 1,2 metros por las condiciones climáticas.
"También hemos encontrado cráneos y vértebras de cocodrilos primitivos en Ojo de Opache. Parte de estas investigaciones serán presentadas a la sociedad científica próximamente en el Congreso Geológico Chileno", comentó Rojas.
Los investigadores además han descubierto pisadas de dinosaurios del Jurásico Continental en el sector bajo de Ojo Opache, que se denomina Quebrada San Salvador. Allí habían barros primitivos por donde caminaron animales como los raptores, el Atacamatitán y los "cuellos largos", de los cuales se encontraron huesos al norte de minera El Abra.
"Tuvimos una gran distribución de animales. En el Cerro Quimal, camino a San Pedro de Atacama, hemos localizado restos de aetosaurios, que eran especies de cocodrilos primitivos que son abuelos de los dinosaurios. Hay mucho material para el estudio en la zona, pero en Chile la paleontología es una materia nueva", expresó Osvaldo Rojas.
Jurásico
Muchos de los fósiles encontrados alrededor del mundo corresponden al Jurásico.
En la zona de Calama se han identificado siete tipos de dinosaurios, entre reptiles marinos, peces fósiles, herbívoros y carnívoros terrestres.
Una de las especies identificadas es el iguanodón, del que se hallaron restos fósiles en la Quebrada San Salvador y que midió 3,5 metros de altura, con un peso de 4 toneladas.
Otro hallazgo corresponde a huellas de un theropodo, un carnívoro de 2,8 metros que pesaba una tonelada.
El pteranodón, que era un animal piscívoro y alado, que pesaba apenas 8 kilos; y el plesiosaurio, una especie marina que pesaba 1,1 toneladas y media 2 metros, también habitaron la zona.
Pero la región además ofrece a los investigadores evidencias de especies de periodos más recientes. Por ejemplo, se encontraron vestigios del Megaterio (perezoso gigante), el caballo americano, milodones y macrauquenias. Este último corresponde a una especie herbívora que habitó el Pleistoceno, periodo en que aparecen los primeros homo habilis.
En diciembre de este año la CCTC lanzará un libro sobre los mamíferos extintos que poblaron este territorio.