Eugenio Sugg Gálvez
Un grupo de inversionistas chinos manifestó su interés por construir un corredor ferroviario que una el puerto fluvial de Barranqueras en Resistencia, provincia del Chaco en Argentina, con los terminales marítimos de Mejillones. Así lo anunció ayer el intendente Valentín Volta, quien adelantó además el inicio de los estudios necesarios para sustentar el proyecto, los cuales serán financiados por el Gobierno Regional.
Efectivamente, Volta y parte del equipo que compone la Unidad de Asuntos Internacionales del Gobierno Regional hizo hace unas semanas una presentación en la embajada de China en Chile a autoridades e inversionistas del gigante asiático, la cual obtuvo muy buena acogida y culminó con el compromiso de ambas partes para seguir profundizando en los estudios necesarios para ejecutar esta iniciativa.
Es así como Volta viajó la semana pasada a Asunción (Paraguay) y desde ahí -vía terrestre- hasta San Miguel del Oeste, del estado de Santa Catarina, pasando por el puerto fluvial de Barranqueras. En esa gira, la autoridad comprobó la enorme capacidad y potencialidad de producción agropecuaria que tiene toda esa área mediterránea del centro de Sudamérica.
"También fuimos testigos del interés del empresariado exportador por disponer de una salida directa a los mercados del Océano Pacífico, especialmente los del Asia, lo cual ya es factible por caminos internacionales y muy luego a través del ferrocarril que une a todo el norte argentino con los puertos antofagastinos, cuando reinicie sus servicios el tren internacional Salta-Antofagasta", comentó.
Estudio
Esa visita permitió recoger antecedentes en terreno para los términos de referencia del estudio que sustentará el proyecto, el cual será presentado antes de fin de año para desarrollarse durante 2016.
"Ese estudio -que esperamos cuente con el financiamiento del Gobierno Regional- tendrá como objetivo identificar la calidad y cualidad del mercado de la Zicosur, fundamentalmente agroganadero y forestal, evaluará la infraestructura ferroviaria y portuaria que se necesitará para materializarlo, e incluirá un análisis de mercado", explicó Volta.
Se estima el estudio requeriría una inversión de $300 millones.
La primera autoridad regional destacó que una iniciativa como ésta "tal como lo ha planteado la Presidenta Michelle Bachelet, permitirá potenciar a nuestra región como una plataforma de transporte multimodal que permita sacar las riquezas de Sudamérica hacia los mercados del Pacífico".
Enclave
Herman Cortés, jefe de la Unidad de Asuntos Internacionales del Gobierno Regional, explicó que "si bien ya existe una infraestructura ferroviaria entre Barranqueras y Mejillones, esta data de 1920 y requiere de muchas mejoras para soportar el tránsito de los nuevos convoyes".
Cortés destacó la ubicación estratégica del puerto de Barranqueras, ubicado en la confluencia de los ríos Paraguay y Paraná, ambos navegables y usados como vía fluvial para transportar carga desde Brasil, Bolivia, Paraguay y el noreste de Argentina hasta los puertos de Rosario y de Buenos Aires, hacia el Océano Atlántico.
Puerto Barranqueras dispone de amplios silos para almacenar granos, diversos galpones para diferentes cargas y extensas explanadas para ampliar sus instalaciones, si así fuera necesario.
Por ello -agregó Cortés- será un punto de recepción y acopio de carga, especialmente la que llegue allí por vía fluvial, y de posterior despacho en ferrocarril para el norte de Chile y a sus puertos, cuando las exportaciones van destinadas a mercados del Asia y otros del Océano Pacífico.
Finalmente, Cortés aseguró que durante la visita de la semana pasada, comprobaron que están plenamente utilizables las vías férreas para que esas cargas también puedan salir por los ramales que atiende el Ferrocarril Belgrano Cargas, para llevarlas a Salta y de allí a Socompa con destino a puertos regionales.
Tren Bioceánico Brasil-Perú
En la actualidad ya hay un acuerdo tripartito entre Brasil, Perú y China para llevar adelante un proyecto de Tren Bioceánico cuyo trazado uniría el puerto peruano de Bayóvar en Piura con el puerto brasileño de Açu, y que permitiría el intercambio comercial con el puerto de Tianjin. La obra costaría US$10.000 millones y comprende un tendido de 8 mil kilómetros en ambos países sudamericanos. Sin embargo, la enorme magnitud del proyecto y consideraciones económicas de entidades como la Unión Internacional de Ferrocarriles han planteado dudas respecto de la verdadera conveniencia de materializarlo en las condiciones actualmente planteadas.