Redacción
Duraría milésimas de segundos, pero sería clave en la investigación. Se trata de una imagen captada por una cámara de seguridad en la que supuestamente aparece el furgón que atropelló a Claudio Olivares Bignani (48), el auxiliar del Cesfam Centro Sur que murió el pasado 6 de febrero, luego de ser arrollado intencionalmente.
El trabajador agonizó 13 días antes de fallecer en la UCI del Hospital Regional, donde ingresó el 24 de enero con fractura de tórax y serios daños en un pulmón, riñón e hígado. Posteriormente, su fallecimiento fue calificado por el Ministerio Público como un homicidio.
La hermana de la víctima de 48 años, Nathaly Olivares, explicó que no maneja toda la información del caso, ya que hay datos resguardados para asegurar la investigación. Pero sostuvo que el fiscal Mario Concha Matus ha mantenido a la familia al tanto de los antecedentes más importantes.
Olivares manifestó que en el lugar donde Claudio fue atropellado, en calle Achao con Pisagua en la población Corvallis, había una cámara de seguridad de una empresa.
Peritajes
"Las imágenes registraron el vehículo, aunque eran muy difusas y tuvieron que realizar pericias para obtener características relevantes del automóvil. Tengo entendido que la duración es de milésimas de segundos", precisó la hermana del auxiliar.
Nathaly vive en La Serena, Cuarta Región, junto a sus padres y cuando le informaron del accidente viajó a Antofagasta. Una de las primeras cosas que hizo fue ir al sitio del suceso, donde un testigo le aseguró que la mañana del atropello, a Claudio lo bajaron de un vehículo y lo atropellaron en reiteradas oportunidades.
Más tarde, esta versión encajó con el diagnóstico de las heridas que se determinaron en el Hospital Regional, lesiones compatibles con arrastre generado por atropello. La mañana del 6 de febrero, desde la UCI llamaron a la familia de Claudio para que se despidieran de él, ya que el auxiliar ya no podía resistir más las fracturas, los daños le ocasionaron una falla renal y las graves hemorragias internas.
Nathaly manifestó que el Ministerio Público tendría cuatro sospechosos identificados, quienes "se relacionaban directamente con Claudio y siguen como si nada viviendo y trabajando en Antofagasta".
"En más de una oportunidad la PDI ha tomado declaraciones a varias personas", agregó la hermana del fallecido, quien dijo que el crimen tendría connotaciones homofóbicas, ya que los involucrados "tienen familia e hijos, pero llevan una doble vida".
Meses antes de morir, Claudio había manifestado a su círculo más íntimo que recibía amenazas constantemente a través de mensajes de texto. Estos advertían, por ejemplo, que disfrutara Navidad y Año Nuevo porque podían ser las últimas fiestas para él.
También que tuviera cuidado durante la noche. Es más, la madrugada del 24 de enero, Olivares acudió a la casa de unos amigos que vivían muy cerca de su domicilio y tras terminar la velada, prefirió quedarse a dormir allí antes que caminar sólo a esas horas.
Cerca de las siete de la mañana, cuando ya había amanecido, decidió irse a la casa donde arrendaba una pieza y por el momento, se desconoce qué ocurrió desde que salió de la vivienda de sus amigos hasta que lo encontraron inconsciente en plena vía pública.
Claudio Olivares Bignani vivía sólo en Antofagasta y trabajaba como auxiliar en el Cesfam Centro Sur. Tras el decesos, sus restos fueron sepultados en La Serena y la PDI comenzó la investigación por homicidio.
13 días agonizó Claudio Olivares en la UCI del Hospital Regional. Falleció la mañana del 24 de enero.