Algunas dietas bajas en grasa no ayudarían a perder peso
ALIMENTACIÓN. Una investigación asegura que no existen grandes diferencias entre uno y otro método. Todo depende de la proporción de lípidos y carbohidratos.
Es común que las personas realicen dietas en esta época para perder peso y tener una mejor figura en el verano. Sin embargo, no todas funcionan de la misma forma y algunas no entregan los resultados esperados.
Un estudio publicado por The Lancet Diabetes & Endocrinology advierte que las dietas bajas en grasa no conducen a una mayor pérdida de peso a largo plazo. Esto, en comparación a las dietas altas en grasa, que sean bajas en carbohidratos o que sigan la línea de la dieta mediterránea.
La especialista Deirdre Tobias, del Brigham and Women's Hospital de la Escuela Médica de Harvard (EE.UU.), realizó un análisis que involucró a más de 68.000 adultos.
"No hay buena evidencia para recomendar dietas bajas en grasa. Detrás del asesoramiento dietético actual para eliminar grasa, que contiene más del doble de calorías por gramo de carbohidratos y proteínas, la idea es simplemente reducir la ingesta de grasas, lo que naturalmente lleva a la pérdida de peso. Pero nuestra evidencia sugiere claramente lo contrario", explicó Tobias en un comunicado de prensa.
Análisis
Para efectos de la investigación, Tobias y su equipo hicieron una revisión y análisis sistemáticos de todos los ensayos aleatorios que compararon la efectividad de las dietas bajas en grasa con otras.
El fin de estos ensayos aleatorios fue mejorar la pérdida de peso a largo plazo (al menos un año) en mujeres adultas no embarazadas.
Los investigadores tomaron en cuenta la intensidad de las dietas que iban desde folletos o instrucciones al comienzo del programa hasta otros regímenes de mayor alcance, que incluyeron sesiones de asesoramiento, reuniones con nutricionistas especialistas en el tema, diarios de alimentos y clases de cocina.
El análisis de 53 estudios, que involucraron a 68.128 adultos, no mostró diferencias en la pérdida de peso promedio entre las dietas bajas y altas en grasa.
De hecho, las dietas bajas en grasa solo conllevaron a una mayor pérdida de peso en comparación con el hecho de no hacer ningún régimen y dio lugar a una mejor baja de peso en comparación con las dietas bajas en carbohidratos, a pesar de que las diferencias fueron pequeñas, del orden de 1,15 kilos.
Del mismo modo, solo teniendo en cuenta los ensayos sin el objetivo de perder peso, por ejemplo, en caso de sufrir enfermedades como el cáncer, los participantes que siguen una dieta baja en grasa perdieron cantidades similares de peso en promedio en comparación con otras dietas.
En otras palabras, esta teoría subraya la importancia de hacer una dieta equilibrada y de buscar la asesoría adecuada de acuerdo a las necesidades de quien desea comer más sano y mejorar su peso.
La autora del estudio sostuvo que hay que conocer cómo funcionan los nutrientes y conocer la proporción de las calorías que provienen de la grasa, los carbohidratos y las proteínas que se adhieren a largo plazo.
Las ventajas de la dieta mediterránea
La dieta mediterránea es una de las más recomendadas por los estudios más recientes sobre nutrición. Combinada con una rutina de ejercicios adecuada, este tipo de comidas evita la obesidad y las enfermedades cardiovasculares ya que ayuda a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre, además de su bajo aporte calórico. Frutas, verduras, legumbres, pescado, aceite de oliva, carne de ave, huevos y lácteos son los productos que forman parte de este menú.