Karina Marcia Guzmán Arias nació en Antofagasta el 28 de agosto de 1981, y desde muy pequeña supo que lo suyo era ser bombero. Cuando estaba estudiando en el Liceo Marta Narea Díaz, se planteó la posibilidad real de ser voluntaria.
"Desde muy niña que me gustó esto de ser bombero, me gustaba la idea de ir a combatir el fuego", planteó Guzmán en una entrevista para este medio.
Pero sueño se veía imposible en los primeros años de la adolescencia porque el Cuerpo de Bomberos de Antofagasta no aceptaba mujeres en sus filas.
Con una basta tradición, el cuerpo bomberil esta destinado solo para hombres, a pesar que el ingreso de la mujer a actividades cotidianas ya venía desde hace un par de años.
Hasta que esto cambió a comienzos del nuevo siglo y Karina pudo entrar a la Sexta Compañía.
"Fuimos la primera generación de mujeres y los cuarteles no estaban acondicionados para nosotras", comentó.
Con cariño recuerda a sus amigas pioneras en la institución antofagastina.
El paso del tiempo significó que se ganara el cariño y respeto de sus pares, participando de las emergencias como una más del grupo.
Su disciplina y perseverancia le significó ir ascendiendo poco a poco dentro de la institución bomberil
Sus fortaleza de líder dentro de su compañía, sumado a la buena relación con el voluntariado, significó que ocupara el puesto de directora de la Sexta Compañía, siendo la primera mujer en ocupar dicho puesto en el Cuerpo de Bomberos de Antofagasta.
Pero su vida no gira tan solo la activa participación en los grupos de emergencia.
Tras salir del céntrico liceo, estudió técnico en enfermería, profesión que le ha sido útil estando dentro de bomberos.
Pero esta madre de un pequeño de 3 años siempre superarse a si misma, por lo que entró a estudiar derecho, carrera que está próxima a terminar.
Su desarrollo como voluntaria bomberil también se incrementó en los últimos años, logrando participar en distintas capacitaciones para el tratamiento de emergencia con materiales peligrosos, lo que hace de Karina una de las pocas especialistas en el tema.
Camilo Kong
Con sólo 25 años, Camilo Kong Pineda es uno de los mayores defensores del a veces maltratado patrimonio de Antofagasta.
Por eso creó la agrupación "Antofapatrimonial" que busca la preservación de lugares históricos de la comuna con el fin de generar una mejor identidad entre los antofagastinos.
Su más reciente "lucha" (como le gusta nombrarle) es la defensa de las tradiciones casas Dauelsberg y Cable West Coast ubicadas en la intersección de Bolívar con Washington cuyos dueños vendieron el inmueble que data de 1990 para construir un edificio de oficinas, cambiando la arquitectura del Barrio Histórico sin tener claro si la estructura será demolida.
Actualmente la agrupación que lidera Camilo reúne a cerca de 20 vecinas y vecinos antofagastinos entre las que se encuentran profesores, técnicos en turismo, sociólogos, arquitectos, entre otros.
"Por mi sangre corre la esencia del antofagastino: las raíces del inmigrante, ciudadano del mundo, y del chileno que vino en busca de oportunidades en esta tierra de riqueza natural. Llevo a Antofagasta a cada sitio que voy, amo mis raíces", dice Kong.
Realizó su enseñanza media en el Eagle School, donde destacaron sus dotes de líder al ser presidente del Centro de Alumnos. Tras dejar el colegio estudió un Diplomado en Patrimonio Cultural, Ciudadanía y Desarrollo Local en Santiago.
Fue en esta etapa de su vida donde Camilo Kong se dio cuenta cual era el camino a seguir en su vida.
"Estos estudios me han permitido comprender que en cada lugar del mundo existe alguien que ama sus raíces y vuelve constantemente a ellas, que trabaja por ello y que tiene ganas de transformar la realidad. Esa es mi identidad. El resto ha sido estar en el lugar y en el momento correcto", agregó.
Pero las expectativas de este joven antofagastino van más allá de resguardar un edificio antiguo, por el contrario, que estas instancias permitan generar cultura en la comunidad
"La intención es seguir visibilizando nuestro trabajo dentro de la comunidad antofagastina, para luego posicionarnos como un actor social capaz de contribuir a nuestra ciudad en la salvaguarda y difusión de su patrimonio", finalizó el joven líder antofagastino.