La Comisión Asesora Salarial, establecida en el protocolo de acuerdo entre el Gobierno y la CUT en julio de 2014, entregó ayer a la ministra del Trabajo, Ximena Rincón, y a su par de Hacienda, Rodrigo Valdés, su informe final con las conclusiones para aumentar el sueldo mínimo y ayudar a disminuir la pobreza en Chile.

La primera propuesta consiste en aumentar, en promedio, el sueldo mínimo en un 2,2% real anual para los próximos 10 años, sin considerar la inflación.

Con ello, y sin considerar las variaciones que puedan existir por las alzas o bajas de los precios productos, el salario mínimo en el país podría llegar a los $ 310.773 en una década, teniendo en cuenta que a partir del 1 de enero de 2016 subirá a $250 mil.

Una segunda propuesta es que el Gobierno se fije como meta bajar a un 3,5% el porcentaje de asalariados que viven en situación de pobreza.

Además, sugiere fomentar la tasa de empleo de las familias que viven en hogares en situación de pobreza y crear, en promedio, cinco mil nuevos puestos de trabajo al año.

También propone la creación de un panel que acompañe en la implementación de las medidas y monitoree la evolución de esta propuesta.

Por último, plantea cuatro medidas complementarias que tienen por objetivo fortalecer la propuesta principal, con políticas de mediano y largo plazo para el sector del trabajo: nuevo sistema de monitoreo para el pago de las gratificaciones; fortalecimiento de las Oficinas Municipales de Intermediación Laboral (OMIL); modernización de la franquicia tributaria de capacitación, y estudiar en profundidad la demanda de trabajadores vulnerables.