El norte de nuestro país ha visto cómo ha evolucionado la migración. Se trata de un fenómeno global, que en el caso de Chile, ha puesto una serie de desafíos al Estado, dados sus propias características sociales y económicas, y las tareas aún pendientes con los chilenos y chilenas.
Y aunque "Si vas para Chile", la composición de Chito Faró, recuerda que "Verás cómo quieren en Chile, al amigo cuando es forastero", lo cierto es que nuestro país lentamente ha estado aprendiendo a convivir con el migrante. Y no sólo a convivir, sino que a desarrollarse y a aprender, a relacionarse y a crecer.
Estadísticas que trabaja el Servicio Jesuita a Migrantes (SJM) muestra que las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá y Antofagasta cuentan con una fuerte presencia de peruanos, el principal colectivo migrante superado sólo por bolivianos en Antofagasta. A ellos se suma el importante incremento de ciudadanos colombianos, que son la tercera colectividad de este tipo con más presencia en Antofagasta.
En el marco del Día Internacional del Migrante, que se recordó este 18 de diciembre, el secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU) Ban Ki-Moon llamó a comprometernos "a dar respuestas coherentes, amplias y basadas en los derechos humanos, guiándonos por la legislación y las normas internacionales y un empeño compartido en no dejar a nadie atrás".
En un planeta donde se estima, una de cada 33 personas es un migrante, y en nuestro país donde se calcula que la migración se traduzca en cerca de un millón de personas en los próximos ocho años, el enfrentar este escenario desafío para el Estado.
Porque Chile debe preocuparse, en un sentido, por resolver las desigualdades y desafíos propios. Pero al mismo tiempo, sensibilizarse ante un fenómeno migratorio que es reconocido en todo el planeta, y que se ve favorecido por avances en las comunicaciones y el transporte.
No sólo se necesita una legislación moderna que se haga cargo de este escenario, sino que también una cultura distinta, inclusiva, y que sepa recoger los beneficios de la interculturalidad.