Otro chileno en Alemania también tuvo su celebración. Luego de meses lesionado y ya completamente integrado al plantel titular del Bayer Leverkusen, Charles Aránguiz anotó su primer gol en la Bundesliga. El cuadro de la aspirina se enfrentó al Borussia Mönchengladbach y gracias al "Príncipe", a los 19 minutos ya tenía la ventaja. Sin embargo, el doblete de André Hahn (42' y 78') sentenció la derrota para el volante chileno y sus compañeros, terceros de la liga.
El serbio Novak Djokovic y el británico Andy Murray se medirán hoy en la final del Masters 1000 de Madrid, luego de derrotar ayer a sus respectivos rivales.
El primer duelo estuvo a cargo del oriundo de Glasgow, que derrotó al local Rafael Nadal con un apretado 7-5 y 6-4. Luego vendría la acción del número uno del mundo, quien venció al japonés Kei Nishikori por 6-3 y 7-6 (7-4).
Sin duda, quien sufrió más durante la jornada fue Nadal. El español, quinto del ranking, llegaba a la arcilla de la capital española lanzado tras ganar los títulos de Montecarlo y Barcelona las últimas semanas, en las que elevó notablemente su tenis y exhibió la confianza que le abandonó en un 2015 de dudas y ansiedad.
Pero Murray pudo doblegar el juego del español. "Ganarle en España en arcilla es un gran reto para cualquiera. Estoy encantado, es un gran paso para mí según como estaba en las últimas semanas. Estoy en la buena dirección", manifestó el escocés al finalizar el match, citado por DPA.
En el segundo duelo, Djokovic trabajó extra en el tramo final del encuentro tras desaprovechar cuatro match points, uno de ellos con doble falta y otro con una derecha fácil a media cancha, que se fue por centímetros con Nishikori ya vencido.
Esos dos errores fueron con "Nole" sacando con 5-4 a favor y el nipón rompió el servicio para forzar el tie break. Fue ahí, en el desempate, 25 minutos después de su primer match point, cuando por fin el serbio cerró el duelo.
Ausente las dos últimos años en la arcilla española, Djokovic buscará su quinto título de la temporada.
Luego de un show en el que el tenor italiano Andrea Bocelli interpretó los clásicos "Nessun dorma" y "Con te partiro", el Leicester cerró la semana de celebraciones derrotando al Everton con un cómodo 3-1 y alzando por primera vez el trofeo de la Premier League.
El King Power Stadium lucía las banderas azules y blancas de la hinchada que repletó los asientos y cantó sin cesar "campeones". Mientras, el conjunto de Claudio Rainieri hizo gala de su condición triunfante en la penúltima fecha de la liga inglesa, ante un discreto Everton que no dio muestras de empañar la fiesta de los "Foxes".
El goleador Jamie Vardy, con un doblete (5' y 66'), lideró el triunfo del flamante campeón, aunque siete minutos más tarde perdió la ocasión de su tercer tanto al ejecutar un penal por encima del travesaño.
El restante gol de los "Foxes" lo anotó Andy King, a los 33', uno de los jugadores históricos del equipo, ya que participó en las tres categorías que militó el Leicester en las últimas temporadas.
Kevin Mirallas, a dos minutos del final, descontó para el Everton, que antes de iniciar el partido le hizo un pasillo de honor al Leicester.
En la fecha anterior, después de empatar 1-1 con el Manchester United y aprovechar la igualdad del Tottenham 2-2 ante el Chelsea el lunes, el conjunto de azul había logrado el título de la Premier, una hazaña inesperada dada su falta de historial.
Pero la constancia del Leicester, sumada a los errores de los equipos considerados más fuertes, dio como resultado el primer título y la chance de acceder, por ejemplo, a torneos como la Champions League.
En tanto, hoy se vivirá un nuevo duelo de chilenos, ya que el Manchester City de Manuel Pellegrini recibirá al Arsenal de Alexis Sánchez al mediodía (Chile) en el Etihad Stadium.
Pese a que los "Gunners" tienen tres puntos de ventaja sobre los "Ciudadanos", un descuido podría poner fin o alargar la lucha por el cupo directo a la Liga de Campeones de la UEFA.
Ya se conocen dos de los tres equipos que ascenderán a la Premier League. El Burnley se coronó campeón de la segunda división inglesa. Junto a su escolta, el Middlesbrough, obtuvieron el cupo directo al ascenso.
El Brighton buscará ahora el tercer y último cupo para ascender a la primera división, en los playoffs que también disputarán el Sheffield Wednesday, el Hull City y el Derby County.
El periplo europeo de Arturo Vidal ha cosechado grandes éxitos y por ello se le apoda como el "rey Arturo". La última muestra de aquello fue el cuarto título consecutivo que obtuvo ayer el Bayern Munich, que aseguró el liderato definitivo de la Bundesliga tras derrotar como visita y por 2-1 al Ingolstadt.
Sin embargo, el volante chileno quedó fuera de la celebración. No fue convocado producto de un cuadro infeccioso que sufrió horas antes del encuentro entre los elencos de Baviera.
El día anterior, Vidal había publicado una fotografía de los entrenamientos en su cuenta de Instagram, con una arenga para su equipo acompañada del "Mia San Mia", el lema del conjunto de Munich.
Gracias a la victoria ante el Ingolstadt, el Bayern sumó su cuarto título consecutivo en la Bundesliga, cifra histórica en la división de honor alemana. Esto no solo constituye un bálsamo para los alemanes, recientemente eliminados de la Champions League, sino que también es la antesala del fin de la era Guardiola en Alemania.
En cuanto al formado en Colo Colo, logró su doceavo título en 11 años de carrera. Tres junto al Cacique, uno con la selección nacional, siete en Italia vistiendo la camiseta de la Juventus y ahora su primer trofeo en tierras germanas.
Los jugadores del Bayern Munich, ataviados de blanco, buscaron desde el primer minuto el triunfo absoluto a través de la presión ofensiva. En esa línea, el polaco Robert Lewandowski fue nuevamente el protagonista del marcador.
El primer gol de "Lewy" llegó a los 14 minutos. La caída de Franck Ribéry en el área derivó en un penal, aunque en un principio sembró dudas.
Veinte minutos después, el hasta ahora máximo goleador de la Bundesliga envió un remate al palo derecho, imposible para el meta Ramazan Ozcan. Era el 2-0 para la escuadra visitante.
Pero antes de finalizar el primer tiempo el juez cobró otro dudoso penal, esta vez a favor del Ingolstadt. El encargado de marcar la diferencia fue Moritz Hartmann.
Los peligros para ambos continuaron en el complemento, pero el marcador no cambió y el pitazo final dio pie a la celebración del Bayern Munich en estadio ajeno.
El próximo sábado, el equipo de Vidal disputará la última fecha de la Bundesliga ante un Hannover ya descendido y de luto por la muerte del joven jugador Niklas Feierabend. Los bávaros también están a la espera de la final de la Copa de Alemania frente a su archirrival, el Borussia Dortmund.