Nueve años pasará en la cárcel por el crimen en Coloso
JUICIO. Víctima tenía 24 años y recibió dos disparos por rencillas.
A una pena de nueve años de presidio mayor en su grado mínimo fue condenado José Sánchez Fre, quien el 24 de julio del año pasado, alrededor de las 14.30 horas y a raíz de disputas anteriores, dio muerte a Helmut Iskrac Castro de 24 años.
Tras el juicio oral que consideró la intervención de varios testigos y peritos, pudo establecerse que ese día, el acusado tomó un revólver que mantenía en su domicilio, y fue en busca de la víctima que vivía en el sector caleta Coloso, al sur de Antofagasta.
Luego de un intercambio de palabras le disparó dos veces. Uno de los impactos le dio en la región abdominal izquierda y el segundo, en la parte trasera del hemitorax izquierda en la espalda, lesiones que le provocaron la muerte cuando recibía atención médica en la vía pública.
De hecho, paramédicos del Samu intentaron reanimarlo a unos metros del Retén Playa Blanca, pero éste falleció a causa de las lesiones que sufrió.
Durante el juicio el acusado renunció a su derecho a guardar silencio, y declaró que los problemas con los hermanos Iskrac comenzaron a principios de julio, ya que su hijastro comenzó a recibir amenazas a insultos.
Dijo que en alguna ocasión lo golpearon y le dijeron que lo iban a matar, le pedían que se fuera de Coloso.
Con el paso de los días -según dijo en el estrado-, se fueron agravando las cosas, como por ejemplo, el 21 de julio en la madrugada, cuando escuchó unos gritos de auxilio de su hijastro, que era perseguido por cuatro muchachos, entre ellos la víctima.
Disparos
En tanto, el padre de la víctima (testigo protegido) dio una versión totalmente distinta respecto de cómo ocurrieron los hechos.
Dijo que ese día su hijo Helmut salió de la casa luego que uno de sus hermanos lo llamara para decirle que el acusado junto a unos colombianos, lo estaban siguiendo por los cerros y le disparaban.
Asegura que su hijo no portaba ningún arma. Vio que hacia ellos venía una camioneta azul con dos colombianos agarrados en la parte de atrás, en las barandas, con unos sables y cuchillos, como verdaderos sicarios. Dijo que Helmut recibió dos tiros a sangre fría, a unos 2 a 3 metros.