El mundo tiene olas de cambio, como la biotecnología, o la libertad de comercio. ¿A cuáles debiéramos estar atentos a futuro?
Esa única pregunta desata una profunda reflexión en el vicepresidente de Corfo, Eduardo Bitrán Colodro, para quien la minería, la actividad económica más relevante del país, debe ser la base sobre la cual la nación dé un salto cualitativo en materia de innovación.
En su opinión, es evidente que las grandes tendencias globales pueden afectar dramáticamente el curso de los negocios, de una región o un país entero; de allí, la importancia de advertir qué viene en el futuro, a fin de promover un mejor desarrollo.
"Si vemos cuál es la tendencia de cambio, es una nueva revolución digital que tiene que ver con la llamada internet de las cosas, que tiene que ver con la conectividad, a través de la web, de objeto con objetos. Los grandes pensadores sobre el management han planteado que generará cambios de paradigmas y producción dramáticos. Ya está ocurriendo, por ejemplo cuando se está hablando de los automóviles sin chofer; no está masificado, pero ya existe y esto puede cambiar las formas de producción", precisa.
Cambios
Bitrán destaca que la productividad total de factores de la gran minería viene bajando hace una década a ritmos de 8% anual. Un aspecto clave es la explotación cada vez más compleja de súlfuros, fenómeno irreversible que obligará al país, por ejemplo, a avanzar en minería subterránea y, consecuencialmente, avanzar en procesos autónomos, que son precisamente 'internet de las cosas'.
Lo interesante y desafiante es que tales desarrollos hoy no están resuelto en el mundo, es decir, hay mucho que avanzar en la interoperabilidad para la gestión, por tanto hay un desafío para el trabajo público privado en el asunto.
"Tenemos que avanzar para que las grandes empresas del mundo, que están presentes en Chile, definan el estándar y trabajen con una tecnología interoperable. El punto es que este conocimiento se irradia a otros sectores de la economía, pero requiere de alto capital, requiere que cuatro compañías que están en Chile se pongan de acuerdo", explica.
Lograr este avance puede costar entre 8 y 9 mil millones de pesos, pero Corfo, dice Bitrán, puede invertir $5 mil millones, siempre que sea una innovación abierta.
Desde allí las posibilidades son múltiples, insiste el ejecutivo: astronomía, desarrollo energético, donde Chile puede dar un salto cualitativo.
Crear una visión
¿Qué debe ocurrir para concretar esto? El personero reitera que se trata de tener "una visión", compartida además de crear capital social entre los sectores relevantes de la región: empresarios, sector público, universidades.
"Las empresas invierten poco en I+D y aquí hay que ser capaz de generar una minería virtuosa para transformar el país a partir de los desafíos de la minería. Aquí hay que pensar en los próximos 20 años porque tenemos minería para 80 años más".