Carolina Collins/Efe
El ejercicio no solamente ayuda a llevar una vida más saludable y tener un mejor estado físico. Ahora se sabe que además puede ser útil a la hora de retener lo que se busca aprender.
Así lo reveló un estudio publicado ayer por la revista especializada Current Biology, que asegura que ir al gimnasio para hacer ejercicio cuatro horas después de aprender algo, ayuda a potenciar la memoria, haciendo más eficiente la fase del aprendizaje.
El estudio demuestra que "podemos mejorar la consolidación de la memoria haciendo deportes después del aprendizaje", según afirmó uno de los autores de la investigación, Guillén Fernández, del Instituto Donders del Centro Médico de la Universidad de Radboud (Holanda).
El experimento
Para ver los efectos del ejercicio en la consolidación del aprendizaje, los expertos hicieron pruebas con un total de 72 personas participaron en el experimento. En él, aprendieron un total de 90 asociaciones de fotos y lugares durante unos 40 minutos antes de dividirlos en tres grupos.
Un primer grupo hizo deporte inmediatamente después del aprendizaje, el segundo realizó ejercicios con una posterioridad de cuatro horas y el tercero no hizo ningún tipo de gimnasia.
El ejercicio que se le pidió hacer a los participantes en el estudio consistió en un entrenamiento de 35 minutos en una bicicleta estática a un ritmo cardíaco del 80% del número de pulsaciones máximas de cada participante por minuto.
48 horas después, los participantes fueron sometidos a un examen para comprobar qué recordaban de las pruebas de asociaciones de fotos y lugares, a la vez que se registraron imágenes de sus cerebros a través de una resonancia magnética.
Así fue que los expertos a cargo de la investigación descubrieron que quienes había ido al gimnasio cuatro horas después del ejercicio de memorización habían retenido la información de mejor manera que el resto de los participantes.
La imágenes cerebrales también mostraron que el ejercicio después de un cierto tiempo estaba asociado a representaciones más precisas en el hipocampo -un área importante involucrada en el aprendizaje y la memoria- cuando el individuo en cuestión respondía una pregunta correctamente.
"Nuestros resultados sugieren que el ejercicio físico a su debido tiempo puede mejorar la memoria a largo plazo y subraya el potencial del ejercicio con una intervención, contextos educacionales y clínicos", concluyeron los científicos.
Sin embargo, los expertos admiten que todavía no ven con claridad cómo o por qué demorar el ejercicio físico cuatro horas tras el aprendizaje provoca ese efecto en la memoria.
Algunos estudios anteriores realizados con animales -agregaron los autores del estudio- sugieren que unos componentes químicos, que son producidos por el cuerpo de manera natural, llamados catecolaminas, como la dopamina y la norepinefrina, pueden mejorar la consolidación de la memoria.
La producción de catecolaminas se estimula con el ejercicio físico. Fernández explicó que una manera de incrementar la producción de catecolaminas es con la práctica de ejercicio. Ahora los expertos buscarán detallar la relación entre ambos procesos.
Estudios anteriores
La revista especializada British Journal of Sports Medicine, publicó en 2014 un estudio que relacionaba el rendimiento académico y la actividad física. La investigación, de expertos de la U. de Dundee, estableció que mientras más tiempo pasaban los escolares en actividades deportivas, mejor rendimiento tenían. En un experimento vieron que los niños que hacían ejercicio tenían puntuaciones en sus pruebas un 30% mayores que sus compañeros más sedentarios.