Cuando la calle es el mejor escenario: cuatro historias de artistas callejeros
EXPERIENCIA. Sus protagonistas cuenta lo bueno y lo malo de trabajar en pleno centro de la ciudad.
Cuando el talento no es suficiente. Cuando las oportunidades muchas veces no se dan y se cierran las puertas, la calle sigue siendo el mejor escenario para un artista.
Los artistas callejeros son el respiro necesario en el constante ir y venir de gente en pleno centro de la ciudad. Día a día los artistas callejeros están obligados a ponen a prueba su talento para cautivar a un público tan variado como exigente. Sin embargo, este oficio muchas veces no recibe el reconocimiento que se merece pese a que hay talento, y mucho.
Solo basta un recorrido por las principales calles del centro de Antofagasta para encontrarse con humoristas, músicos y cantantes, pintores y caricaturistas, magos, bailarines, hombres y mujeres "estatua", mimos, malabaristas y actores, que hacen de las calles céntricas su escenario, de los transeúntes su público, y de las monedas su sueldo.
El año pasado el municipio levantó un proyecto que busca ordenar el centro de ciudad en lo que se refiere a expresiones artísticas y entregar tranquilidad tanto a los artistas locales e itinerantes para el desarrollo de sus artes, como a los trabajadores de locales establecidos y a la comunidad general. A la fecha la situación sigue sin regularse afectando tanto a artistas como a la comunidad que disfruta de estos espectáculos callejeros.
Para este reportaje recogimos las historias de cuatro artistas callejeros que nos cuentas lo bueno y lo malo de trabajar en el escenario de la calle.