Pensiones: escaso conocimiento de afiliados sobre sistema y fondos
REFORMAS. A fin de año comenzará el debate legislativo sobre cambios, mientras 189.752 cotizantes en las AFPs tiene Segunda Región.
La última encuesta de Adimark sobre el Sistema de Pensiones -encargada por la Asociación de AFP-, reveló que un 53,6% de los consultados dice saber muy poco o nada de él, mientras que un 55% no sabe que puede elegir entre multifondos. Los resultados de este estudio pueden resultar preocupantes cuando en el país comienza una discusión sobre cambios a un modelo que -por distintas razones- no ha logrado entregar pensiones dignas a sus afiliados.
Según las cifras de la Superintendencia de AFPs -actualizadas a junio de este año- en la Región de Antofagasta hay 189.752 cotizantes en las administradoras de fondos de pensiones. Los datos de la misma repartición de gobierno indican que -en promedio- los antofagastinos reciben una pensión de vejez que apenas llega a las 5,51 UF, es decir, poco más de $143 mil.
La realidad indica que con ese monto es prácticamente imposible sobrevivir en Antofagasta, una de las ciudades con el costo de vida más alto del país. Por eso es necesario informarse y aprender a sacar partido a esos ahorros.
El objetivo del sistema de pensiones es proveer ingresos de reemplazo para los trabajadores que dejan la vida activa o laboral y cubrir los riesgos de invalidez (total o parcial) y de muerte del trabajador (sobrevivencia), de manera de proteger al afiliado y a su grupo familiar.
Ahorro
El modelo se basa en el ahorro y la capitalización individual de los trabajadores, quienes cotizan en las AFPs en forma obligatoria y también voluntariamente, esto último dependiendo de factores como el interés en incrementar la pensión, la necesidad de jubilar anticipadamente o por las llamadas "lagunas previsionales" (períodos no cotizados en la vida laboral, por cesantía u otros motivos).
En marzo de 2008 fue promulgada y publicada en el Diario Oficial la Ley de la Reforma Previsional, uno de los cambios más profundos que ha tenido el sistema de pensiones chileno en muchos años, reforzado por el esquema de 'Tres Pilares'.
El primero, conocido como Pilar Solidario, apunta a proteger a aquellas personas que no ahorraron para su vejez en ningún sistema de pensiones o lo hicieron en magnitud insuficiente, financiado con recursos públicos; el segundo, conocido como Pilar Contributivo, de ahorro obligatorio y capitalización individual; y el Pilar Voluntario, donde los cotizantes pueden realizar ahorro de forma planificada y voluntaria, de acuerdo a las necesidades de pensión o de anticipación de la jubilación que tengan.
Las seis AFP que operan actualmente en Chile sólo participan de los dos últimos pilares.
Andrés Guerra, gerente general de Previsionartes explicó que las AFPs se financian con el cobro de comisiones a sus afiliados cuando éstos ingresan dinero a su cuenta de ahorro y su objetivo principal es aumentar estos dineros mediante inversiones.
"Si estás contratado, la ley establece que el empleador debe descontar un 10% de tu sueldo y depositarlo obligatoriamente en la AFP que el trabajador elija. A esta acción se le llama cotizar", explica Guerra.
Las AFPs invierten el dinero en distintas herramientas de inversión: bonos, depósitos, acciones, etc. Ésto lo hacen a través de los "multifondos", denominación que tienen los grupos de riesgo de inversión y que actualmente son cinco: A (más riesgoso), B (riesgoso), C (intermedio), D (conservador) y E (más conservador).
"Cuando el cotizante entra por primera vez al sistema -es decir, comienza a trabajar- él elige el fondo donde quiere que estén sus ahorros. Por generalidad, los jóvenes cotizan en el fondo A, pues tienen mayor rentabilidad y más tiempo para recuperarse de posibles crisis. Se recomienda que las personas con un horizonte de inversión mayor a 20 años estén en este fondo", dijo Guerra.
Por el contrario, los trabajadores de edad avanzada suelen estar en el fondo E, pues éste protege mejor sus ahorros en caso de turbulencias económicas.
Analistas
¿Qué pasó en el camino? ¿Por qué las administradoras no están pagando pensiones dignas? La mayoría de los analistas coinciden en que el modelo está hecho para una realidad que hoy no vive Chile.
Las amplias lagunas previsionales y una baja tasa de cotización respecto de otros países, así como el aumento en las expectativas de vida de los chilenos asoman como las explicaciones más recurrentes.
Por esta razón la Presidenta Bachelet anunció hace pocos días una serie de iniciativas para mejorar el sistema.
Ayer, tras una reunión con la mandataria, el Presidente del Senado, Ricardo Lagos Weber (PPD) explicó que tras una etapa prelegislativa serán cuatro los proyectos de ley que se presentarán para cambiar el actual sistema y se espera que el primero de ellos sea entregado a fines de este año para su primer trámite.
"Yo no diría que hay un plazo definido, pero el sentido común dice que si estamos en agosto y tenemos una carga legislativa sobre la discusión del presupuesto y la gratuidad en la educación superior. Yo creo que alguno de los proyectos de ley en esta materia podrían, si hay un trabajo muy duro, tener algo presentado hacia fines de año para poder discutirlos el próximo año", resaltó Lagos.
Entre las medidas propuestas por el gobierno está fortalecer el carácter solidario del sistema, mantener y reforzar el pilar solidario de invalidez y vejez, aumentar la regulación a las AFPs y la creación de una AFP estatal.
Otras medidas serán aplicar una sola tabla de mortalidad y promover la afiliación de independientes al sistema de pensiones.
La única solución: continuar con las AFPs
Frente a las críticas en contra de las AFPs, la pregunta es ¿qué hacemos? ¿Volver al sistema de reparto? No cabe duda de que esa no es la solución, sobre todo si consideramos que muchos países desarrollados que tienen este sistema lo están revisando. La actual estructura demográfica de la población, con un acelerado proceso de envejecimiento, no permite tener una base laboral que soporte el sistema. Además, con el sistema de reparto no tenemos incentivos al ahorro que es justamente lo que necesitamos hoy, que se genere más ahorro para mejorar las pensiones.
Entonces, en las actuales condiciones la única solución es continuar con las AFPs, cuyos niveles de rentabilidad en los últimos veinte años son altos y no han sido cuestionados. La rentabilidad no es el problema de las AFPs, pero sin duda éstas requieren cambios para mejorar las pensiones que efectivamente son muy bajas en el país.
Lo primero que habría que decir es que las AFPs surgieron en un país con una estructura demográfica muy distinta a la actual, cuando tenemos una elevada esperanza de vida, una de las más altas de América, la que de seguro seguirá aumentando. No sabemos hasta qué edad vivirán nuestros hijos, nuestros nietos. Por lo tanto, tendremos que revisar la edad legal de jubilación, tal vez no ahora, pero en los próximos años tendremos que pensar si es adecuado que un hombre jubile a los 65 y una mujer a los 60 cuando la esperanza de vida supera los 80 años.
Lo otro es preocuparse de aumentar los ahorros de los afiliados y eso se puede lograr por varias vías. Por una parte el Estado podría, vía subsidios, hacerse cargo de las lagunas previsionales por lo menos de los sectores de menores ingresos y también se podría discutir aumentar la cotización con aportes del empleador. Son discusiones que se tienen que dar en el país, porque es un hecho que el sistema se debe modificar para aumentar los montos de ahorro.
Antes de pensar siquiera en acabar con las AFPs nos debemos preocupar de resolver otros problemas en el país como mejorar el mercado del trabajo, mejorar la distribución del ingreso que en el país es pésima y elevar el crecimiento, no podemos pretender volver a un sistema de reparto si estamos creciendo al 2%. A las AFPs también tienen responsabilidades como mejorar la competencia, que la movilidad entre los fondos sea más fácil, tener una rentabilidad garantizada e incluso tal vez se podrían revisar las comisiones.
30.139 cotizantes al sistema de AFPs entre 25 y 30 años hay en la región de Antofagasta, siendo el segmento etáreo con mayor participación entre los cotizantes de AFPs en la zona.
UF 5,51 mensual es lo que reciben en promedio los antofagastinos por concepto de pensión de vejez, de acuerdo a los datos de la Superintendencia de Pensiones actualizados a junio.
5.177.277 cotizantes cuenta el sistema de AFPs a nivel nacional, según las últimas cifras -actualizadas a junio- de la Superintendencia de Pensiones.