El difícil momento que atraviesa la economía regional, al parecer, también está afectando a las isapres.
Según datos de la Superintendencia de Salud, este año la cartera de afiliados al sistema privado se redujo en 2.105 cotizantes, fenómeno que estaría influenciado por varios factores, entre ellos, la pérdida de empleos en el sector minero.
En efecto, un reporte confeccionado a solicitud de este Diario muestra que al mes de julio, las isapres contaban en la región con un total de 201.693 afiliados, lo que marca un descenso del 1% respecto de los 203.798 cotizantes que conformaban su cartera al cierre de 2015.
El informe precisa que la mayor pérdida se produjo en la cartera de mujeres, con un descenso de 1.196 usuarias.
La reducción de la bolsa de afiliados se explica por la mayor cantidad de desahucios que se está produciendo este año en la región.
Esta salida de cotizantes, que puede ser por decisión del afiliado, de la isapre o por otra causa, supera largamente a la cifra de nuevos contratos suscritos, produciendo así un efecto en la cuenta general de estas entidades privadas.
La superintendencia precisa en este punto que en los primeros siete meses de este año la suscripción de contratos aumentó 4,2%, mientras que los desahucios crecieron 63,6%.
Respecto a estos últimos (salidas del sistema), el reporte permite estimar que en la región cada día se pone término a 10 contratos de salud por cualquiera de las causales.
Minería
El agente zonal de la Superintendencia de Salud, Javier González, dijo que son varios los factores que podrían explicar la baja de afiliados.
Comentó que una posibilidad es que se trate de una reacción ante las alzas de precios que está registrando el sistema, con aumentos en el valor de los planes o de la prima que las isapres cobran por las Garantías Explícitas de Salud (GES).
"Vemos que la gente continuamente se está viendo obligada a reclamar a la superintendencia o ante los tribunales de justicia para mantener los precios, y eso puede ser un detonante", afirmó.
González sumó a esto un factor coyuntural y de naturaleza local, que dice relación con la fuerte pérdida de empleos en el sector minero.
"Yo creo que regionalmente tampoco es descabellado pensar que por los procesos de desvinculación de trabajadores que se están produciendo, existan afiliados que decidan salir del sistema privado y entrar al público", manifestó.
Al respecto, precisó que a diferencia de las isapres, Fonasa garantiza una cotización fija de 7% y prestaciones similares o incluso más convenientes.
De hecho mencionó que hoy, la suma de la cotización obligatoria, más el costo de un seguro de salud complementario, puede resultar más económica que un plan de isapre, pudiendo el afiliado acceder a la misma red de prestadores a través de la modalidad "libre elección".
Efecto
La diputada Marcela Hernando, integrante de la Comisión de Salud de la Cámara Baja, consideró que la pérdida de cartera claramente obedece al encarecimiento de los planes médicos, lo que se entremezcla con la pérdida de empleos y los menores ingresos familiares.
Hernando dijo que la situación obliga a preguntarse dónde están ahora esos trabajadores, es decir, si pasaron a Fonasa o quedaron sin previsión.
Esto, porque aunque el fondo público también cubre a las personas que no tienen empleo, "se requiere realizar ciertos trámites y no sabemos si esto se está produciendo".
Sostenido aumento de los planes
El valor de los planes médicos en el sistema privado efectivamente muestra alzas constantes. Por un lado está el aumento en el valor base de los planes, que las isapres reajustan todos los años en niveles que superan al IPC, y por otro aparece el ajuste que cada tres años estas empresas realizan a la prima GES. Este último proceso se realizó en julio y se tradujo en un incremento promedio de 40% en la prima. Sólo hasta julio de este año, por ambas razones, la Corte de Apelaciones de Antofagasta recibió 2.581 recursos de protección.