Sin dudas, después de los resultados de las municipales 2016, la Nueva Mayoría aparece como el sector político más dañado, ya que sus candidatos no consiguieron los resultados esperados.

En la comuna de Antofagasta, la candidata Andrea Merino (PS) que ganó la primaria para ser la representante del oficialismo, quedó en el quinto lugar en la votación.

Esto indica que la coalición de gobierno sigue sin tener un candidato sólido para disputar la alcaldía de Antofagasta, sobre todo por la falta de liderazgo de sus autoridades y parlamentarios.

Incluso en plena campaña hubo críticas para el intendente Valentín Volta (DC), quien fue cuestionado por no apoyar lo suficiente a Merino y a la seremi de Cultura, Carla Redlich, le pidieron la renuncia por respaldar al candidato independiente Jaime Araya.

Otro golpe importante para el oficialismo estuvo en la derrota del emblemático alcalde de Mejillones, Marcelino Carvajal (PPD), ya que ahora ese sillón municipal será ocupado por el independiente Sergio Vega, bajo el pacto Chile Vamos.

En las otras comunas, la Nueva Mayoría pudo mantener la alcaldía de Taltal, ya que el edil Sergio Orellana, que milita en el Partido Radical, salió reelecto, pese a la amenaza de Osvaldo Chávez, de Revolución Democrática.

A nivel de liderazgos también aparecen como grandes perdedores los parlamentarios del oficialismo, ya que el senador Alejandro Guillier -ligado al radicalismo- apoyó una primaria de la alianza gobiernista sin el independiente Jaime Araya.

Presidenciable

Guillier no traspasó su buena evaluación en las encuestas nacionales, que lo dejan como presidenciable, a los candidatos de la Nueva Mayoría, y la votación de Andrea Merino deja de manifiesto este fenómeno político.

Incluso, el exalcalde Daniel Adaro (independiente exDC superó a la abanderada del oficialismo, ya que alcanzó el tercer lugar en la votación, pese a su condena por fraude al Fisco y sus problemas de salud, que hicieron temer su participación en estos comicios.

Uno de los grandes perdedores de la jornada es el candidato Jaime Araya (independiente), que no alcanzó una votación aceptable para el capital político que heredó de su padre, el exalcalde Pedro Araya Ortiz, lo que hace muy difícil que vuelva a participar en una elección por la alcaldía.

Araya recibió un duro golpe a su candidatura al ser formalizado en el caso boletas SQM, ya que recibió $12 millones por servicios prestados a la minera. El concejal no fue a juicio y optó por una salida alternativa que ofreció la fiscalía a 30 involucrados en la emisión de documentos para SQM.

Esto también alcanza a su hermano, el senador Pedro Araya Guerrero, que tampoco aportó los votos necesarios para que compitiera con posibilidades a la alcaldía y en cierta manera refleja su paulatina caída en el electorado de la comuna.

Centroderecha

Otro sector derrotado es Chile Vamos, ya que apostó por el exdiputado Manuel Rojas (UDI) y no por la alcaldesa Karen Rojo en estos comicios municipales.

Así, Rojas aparece como el principal derrotado, dejando interrogantes sobre su futuro. La diputada Paulina Núñez, quien hizo una intensa campaña con Rojas, también sufrió una mella, aunque logró resonados triunfos en otras comunas de la región.

En síntesis, la elección municipal cambió el mapa político de la región, en vista que alcaldes emblemáticos perdieron en las urnas.

de las preferencias registró Guillier en la encuesta Cadem, quedando como presidenciable. 34%

fue la última elección ganada por un candidato de la centroizquierda en Antofagasta, Marcela Hernando. 2008