Promover la aventura, entregando una experiencia inigualable en el mar antofagastino, conociendo y coexistiendo por un momento con las muchas variedades de peces, cangrejos, pulpos y otras especies de las costa nortina, es la misión de la escuela (y tienda) Buceo Océano.

Todo esto dentro de un ambiente seguro (normado y regulado) por la Asociación Internacional de Instructores de buceo PADI (sigla en Inglés), cuya certificación sirve para bucear en cualquier playa del mundo.

Para el dueño e instructor de la tienda-escuela de Buceo Océano, con más de 20 años de experiencia en este deporte, Carlos Álvarez Mazú, el poder hacer que las personas conozcan y se conecten con el ambiente submarino, disfrutando de la fauna en vivo y en directo, dentro de su hábitat, es la pasión que los mueve a seguir dedicándose a este deporte y todas sus variantes.

"Nuestra misión es que las personas tengan una experiencia buena, agradable y bajo un ambiente seguro. Entregamos paciencia, confianza y aventura. La cercanía con el hábitat marino, viendo las distintas variedades de peces y especies debajo del agua, que no tienen miedo de nosotros, sino curiosidad cuando los vamos a ver, es algo de otro planeta", precisó el instructor de buceo.

Características

Un punto a favor para este deporte, es que puede desarrollarse durante casi todo el año. Las altas temperaturas de la región, ayudan a que las aguas, al menos hasta unos 30 metros de la orilla, no sean tan frías prolongando el tiempo de inmersión.

Para Álvarez, uno de los mejores lugares para vivir la experiencia de este deporte en la ciudad -aunque se puede desarrollar en casi toda las costa-, es en la isla Santa María, donde el contraste con de lo desértico con el fondo submarino "crea un ambiente mágico de naturaleza, de algo mucho más grande y especial".

Prudencia

Si bien, esta disciplina puede desarrollarse de manera recreacional u observacional, la gran preparación, metodología y rigurosidad de su practica, lo hacen un excelente deporte que no sólo optimiza el estado físico, sino también la concentración y prudencia.

Al estar debajo del agua, no hay manera de comunicarse verbalmente por lo que es preciso aprender una serie de señas que ayudarán a interpretar ya sea los malestares que uno pueda sentir en el agua (calambres y dolor de oído por la presión, entre otros), como también otras situaciones que pudieran presentarse.

Si bien las consecuencias de ser imprudentes pueden ser grave, el tomar las precauciones necesarias, hará que la experiencia sea algo digno de recordar.

los franceses Jacques-Yves Cousteau y Émile Gagnan, inventaron el regulador de aire, artefacto que se utiliza hasta el día de hoy. 1943

"

"Dale con todo hermano @fabianorellana14, mucha suerte en tu nuevo equipo. Nos vemos en la selección".

Arturo Vidal, a Fabián Orellana tras su fichaje en el Valencia.