Antofagastinas postergan hasta los 28 años la decisión de ser madres
SALUD. Cifras del Hospital Regional confirman que la edad promedio en que las mujeres dan a luz aumentó tres años desde 2012. Factores económicos y profesionales incidirían.
"En lo personal antes de tener hijos, necesito realizarme profesionalmente, porque después es muy difícil lograrlo. Además, cada vez son más las exigencias que tienen las mujeres para posicionarse y estar a la altura en el trabajo", comentó la contadora auditora, Gabryela Rodríguez Gutiérrez.
A sus 29 años, esta profesional, casada hace un año y medio con un compañero de carrera de la Universidad de Santiago, ha optado por postergar voluntariamente la maternidad hasta cumplir ciertas metas personales, decisión similar a la que muchas mujeres están tomando y que incide en las estadísticas natales.
Esto, porque hoy las chilenas no sólo tienen menos hijos (1,9 en promedio), sino que además los tienen a edades cada vez más avanzadas.
Hospital
En Antofagasta esto queda de manifiesto en las estadísticas del Hospital Regional, establecimiento que concentra el 55% de los partos que atiende el sistema público en la región.
En 2012 la edad promedio de las mujeres que dieron a luz en el hospital local fue 25 años, en el caso de las chilenas, y 26 para las extranjeras, pero el año pasado los promedios ya se habían elevado a 26 años para las chilenas y 27 para las extranjeras.
En lo que va de 2017, en tanto, las estadísticas indican que las madres chilenas tienen en promedio 28 años, mientras que las extranjeras por ahora se mantienen en 27 años.
De esta forma, si las cifras no se mueven, en sólo cinco años (2012-2017), las edades de las madres habrá aumentado tres años para las chilenas y dos para las inmigrantes.
Factores
El doctor Francisco Bueno, director (s) del Hospital Regional, explicó que la postergación del embarazo es un fenómeno de carácter global, al que Chile y la Región de Antofagasta no escapan, y en el cual influyen distintos factores.
Entre ellos, Bueno destacó que las mujeres están viviendo un fuerte proceso de "profesionalización" que las está llevado a asumir roles cada vez más protagónicos en la sociedad.
Esto -agregó el ginecólogo- las pone frente a la necesidad de postergar la maternidad hasta cumplir ciertas metas de desarrollo individual, como hizo la contadora de la Usach.
"La mujer hoy prioriza la profesionalización, prioriza otros intereses, y posterga la maternidad, y eso nos lleva a tener estas cifras, que van aumentando en relación a tener madres primigestas más tardías", afirmó el doctor.
Según una publicación de la Revista Médica, hasta 1985, las chilenas daban a luz su primer hijo a los 22 años, pero en 2003, el promedio de edad ya bordeaba los 24 años.
La publicación expresa que el aumento de edad se da más marcadamente en la mujer profesional, lo que sustenta la teoría del cambio de paradigma que supone el ingreso de este género al mundo laboral.
Para 2016 el INE calculaba que el 41% de la fuerza laboral en el país estaba compuesta por mujeres, esto es 12 puntos más que en 1986.
La diputada Marcela Hernando dijo que la postergación de la maternidad efectivamente tiene mucho que ver con la caída del paradigma de la "mujer dueña de casa y el hombre sustento del hogar", que se produce a partir de la incorporación más igualitaria de ambos géneros al mundo laboral.
Sin embargo, la ex directora del Servicio de Salud, estima que el fenómeno también está influenciado por las nuevas prioridades que las mismas familias ahora se plantean.
"Yo veo que muchas veces son las parejas las que postergan la maternidad, porque quieren completar etapas antes de que lleguen los hijos, como viajar o lograr cierta posición, etc., es decir, no son decisiones de la mujer exclusivamente", manifestó.
Hernando aseveró que la tendencia impone un desafío no resuelto para el aparato público, en términos de generar condiciones que faciliten a las mujeres ser madres en el nuevo contexto social y profesional donde están insertas.
Riesgos de la maternidad tardía
En relación a los riesgos de una maternidad más tardía, el doctor Francisco Bueno explicó que la edad corte establecida para un embarazo seguro es 40 años, pues pasada esa edad aumentan significativamente los riesgos asociados. Entre los principales, destacó la posibilidad de alteraciones genéticas en los recién nacidos, como el Síndrome de Down, o padecer "síndrome hipertensivo", afección que hoy es una de las principales causas de mortalidad de la mujer en el embarazo.
Prioridad a los proyectos personales
Stephanie Basly (33 años) aún no tiene hijos. Para esta médico veterinaria el ser mamá no está dentro de sus planes "al menos por ahora", comenta. Además de desempeñarse en una empresa del rubro de lunes a viernes, está dedicada a varios proyectos profesionales. Y en sus ratos libres realiza ecografías a animales como gatos y perros. Estas funciones hacen que disponga de muy poco tiempo. Basly cree que las mujeres están postergando su maternidad para priorizar su desarrollo personal. "Las mujeres estamos teniendo hijos más tarde porque estamos dando prioridad a nuestros proyectos personales y profesionales. Sabemos que la maternidad es una tarea para toda la vida y habemos quienes la tomamos con mucha responsabilidad y cautela. No basta con sólo tener el deseo de ser madre".
Paola Tapia tiene 34 años. A esta administradora de empresas la maternidad la sorprendió a los 20 años. Pese a la temprana edad a la que tuvo a su hija Sofía (ahora de 14 años), pudo sacar su carrera profesional adelante, aunque reconoce que siendo madre "cuesta un poco más". Para Paola, la llegada de su hija "fue un regalo muy hermoso". Esta profesional piensa que las mujeres actualmente retrasan su maternidad porque sus prioridades son otras. "Quieren ser un aporte, crecer profesionalmente y contribuir, también viajar, y el aspecto familiar lo ven lejos de la realidad. Las mujeres están teniendo sus primeros bebés después de los 30 años. Después de que han cumplido un ciclo de vida, que tiene relación con el desarrollo, primero académico y luego laboral". Asimismo, manifiesta que ya no existe el mito de "si quedaste embarazada a temprana edad, se te arruinó la vida". "Puedo demostrar que un bebé no viene a arruinar tu vida, sino que al contrario, la viene a mejorar", dijo convencida.
Luego de un pololeo de tres años la pareja compuesta por Víctor Varas y Andrea Sullivan, decidió sólo hace un par de semanas contraer matrimonio. Esta antofagastina de 30 años optó sin embargo por postergar su maternidad para dedicarse a sus proyectos profesionales, a su trabajo y estudios. Sullivan cree que por estos mismos motivos, muchas mujeres han optado por retrasar la llegada de los hijos. "Creo que hoy en día las mujeres estamos privilegiando otras cosas, como viajar, estudiar y trabajar. Y no se trata de ser egoístas, sólo que hoy es tiempo para nosotras y con un hijo todo se torna más complicado". La joven dice que si bien no está en sus prioridades en este momento ser mamá, no descarta serlo en algún futuro próximo "o quizás más lejano".
En el caso de Giselle Jélvez (30 años), la maternidad llegó a los 27 años, cuando nació su hija Josefa (hoy de casi 3 años). Si bien reconoce que no lo esperaba, para esta ingeniera acuicola ser mamá "es el orgullo más grande". "Veo a mi hija Josefa y no me imagino la vida sin ella, es lo máximo", expresa Jélvez. Respecto a las razones por las cuales las mujeres están postergando su maternidad, a diferencia de las antiguas generaciones, explica que esto tiene que ver con las prioridades que actualmente existen. "Antes de formar una familia, las mujeres queremos ser independientes, terminar la carrera profesional, adquirir nuestros propios bienes. Siento que la imagen de la mujer casada con hijos ya está quedando un poco de lado. El matrimonio está pasando a segundo plano, si te casas, ya no es a los 20 años, sino que a los 35 años en promedio". Giselle agrega que lo complicado de esta nueva estructura de vida es que "las mujeres tenemos un reloj biológico que nos obliga a plantearnos la idea de ser madres antes de los 35 años, porque si pudiéramos ser madres, sin complicaciones, hasta los 50 años, lo más probable es que seríamos madres a esas edades".
médico
veterinaria
trabaja y estudia.
Giselle Jélvez,
ingeniera
acuicola
Paola Tapia,
administradora
de empresas
Gabryela Rodríguez tiene 29 años. Hace un año y medio decidió dar el sí en el altar y unirse para siempre a su compañero de universidad, Manuel Ruiz, con quien tuvo un extenso pololeo. Rodríguez es de profesión contadora auditora, labor que comenzó realizando en Santiago y que luego la llevó a Valdivia. Una de las razones por las cuales esta santiaguina quiso postergar su maternidad es dar prioridad a su desarrollo profesional. "Antes de tener hijos, necesito realizarme profesionalmente, porque después es mucho más difícil, y cada día que pasa son más las exigencias que tiene la mujer en diversas áreas de la vida". Sin embargo, esta profesional no descarta ser mamá en un futuro próximo, cuando haya alcanzado las metas que se trazó en el plano personal.
Paula Espinoza, de 29 años, aún no tiene hijos. Esta profesora de inglés pololea hace cinco años y trabaja hace cuatro en un colegio de Antofagasta. Además hace clases particulares. El año pasado dejó la casa de sus padres para vivir sola, por lo que está recién comenzando esta nueva etapa de su vida, la cual quiere complementar con viajes, y seguir especializándose en su carrera. Paula cree que muchas mujeres retrasan la llegada de los hijos por proyectos como éstos. "Siento que en esta etapa de mi vida estoy recién empezando a abrir las alas con mis propios medios. Conocer el mundo, disfrutar mi casa, estudiar para profundizar mi carrera. Esas son las cosas que me mueven hoy. Quizás mañana será la maternidad, pero creo que eso llega cuando se está preparado y aún no me siento lista para ser madre", dijo Espinoza.
Gabryela Rodríguez,
contadora
auditora
Paula Espinoza,
profesora
de inglés
Stephanie Basly,
Andrea Sullivan,