Amelia Carvallo

Casi medio siglo esperó el tercer disco de estudio de la señera banda de rock nacional Aguaturbia, que llegará a los escaparates físicos y digitales en junio próximo. La cantante Denise y el guitarrista Carlos Corales darán a conocer esta semana un nuevo adelanto del disco a través del single "Corazón bye bye", con su versión en español e inglés, surco del nuevo disco que se añade a "En mi lugar", canción que ya conocimos en diciembre pasado.

Tras décadas de silencio y un regreso a los escenarios que se concretó hace casi quince años, el grupo completó esta nueva colección de canciones para traer su sonido al siglo XXI. El concierto de estreno de "Fe, amor y libertad" será el 1 de julio en el Teatro Nescafé de las Artes a las 21:00 horas, y las entradas ya están a la venta a través del sistema Ticketek. Los valores de la admisión van de $10.000 a $24.000, con descuento de 30% para el Club de Lectores de El Mercurio.

Rock y blues

En el mítico mayo de 1968, Aguaturbia subió a los escenarios a remecer con su energía el rico panorama musical sesentero de Chile. Como un cuarteto liderado por el guitarrista Carlos Corales, Denise en la voz, Willy Cavada tras las baquetas y Ricardo Briones en el bajo, muy pronto conquistaron a una fanaticada que les ha sido fiel tras décadas de escucha devota de esas atmósferas psicodélicas con que sabían envolver el blues y el rock.

Denise, cuyo matrimonio con Carlos Corales ya va para las bodas de oro, cuenta al teléfono que hoy hay un "sol curioso" en Santiago, "mezcla de luz y de esmog". Cuando se le pregunta a qué suena lo nuevo de Aguaturbia, cree que el disco "está formado con el repertorio con que el público nos ha favorecido a lo largo de los años, con lo que hemos ido tocando en vivo, así hemos visto con cuáles se sienten más cercanos y entusiasmados, es el público quien ha hecho este disco; tiene un sonido que obviamente no es el mismo de nuestros primeros vinilos, porque en ese tiempo teníamos otra edad, había una inocencia, ahora somos más grandes, el público es diferente porque todo ha cambiado, entonces tiene sonidos actuales".

¿Cuántas canciones trae el disco?

-Ocho canciones, todas en español, y dos más que son temas que les hicimos su versión en inglés porque hay cierto público que quiere eso y a mí me gusta ofrecerlo.

¿Incluyeron covers?

-Esta vez no, son todas inéditas. Y respecto a los otros discos que hicimos, los covers que hicimos tuvimos la inteligencia de hacer verdaderas versiones completas de esas canciones. De hecho, acaba de estar en Chile Mark Farner -el guitarrita, compositor y cantante de Grand Funk- a quien ya le habían hablado de nosotros en Brasil por nuestra versión de "Heartbreaker" y estaba fascinado; también Grace Slick, compositora y cantante de Jefferson Airplane, escuchó nuestra versión de "Somebody to love" y se sintió muy satisfecha, inclusive hizo la alusión que la versión que habíamos hecho nosotros había enriquecido el tema, así que como han sido tan trascendentales esos dos covers es que la gente cree que hacemos covers.

¿Cuál es la canción más reciente de este nuevo disco?

-Tenemos dos que el público se apoderó de ellas, que es "En mi lugar", un tema que va un poco desde la mujer hacia el hombre, y ahora está saliendo "Corazón bye bye", que trata sobre cuando el amor se termina es mejor dejarlo ir que morir de pena y sufrir, mejor ir por un cuento nuevo.

BANDA Y GRABACIóN

El guitarrista Carlos Corales cuenta que la actual composición de la banda es la de un trío más la cantante, estando en el bajo Francisco "Bambino" Arancibia y Pablo Herrera Reiter en la batería. Además, cuenta que para este nuevo disco agregaron los sonidos de un órgano Hammond que aporta el brasilero Gustavo Alburquerque.

¿Cómo fue el proceso de grabación?

-La hicimos en el estudio nuestro, teníamos bien claro lo que queríamos. La producción posterior y mezclas quedaron a cargo de Ángelo Pierattini en su estudio. Lo dejamos en manos de otro porque de repente uno empieza a encontrarle todos los detalles y se pierde el espíritu. Quedamos felices porque el disco suena muy actual pero mantiene la esencia de Aguaturbia.

"Guardianes de la galaxia Vol. 2" debutó recaudando unos US$145 millones de este fin de semana en las salas de cine de Estados Unidos y Canadá, dando inicio a la temporada veraniega de cine de Hollywood con algo que la industria cinematográfica no tenía: una secuela más exitosa que el original.

Los cálculos de los estudios divulgados ayer indican que "Guardianes" recaudó 54% más en este estreno que en el debut del filme original de James Gunn, en 2014.

En ese estreno, que presentó a una banda intergaláctica de inadaptados interpretada por Chris Pratt, Zoe Saldaña, Dave Bautista, Vin Diesel y Bradley Cooper, "Guardianes" recaudó US$94 millones en su primer fin de semana.

Otrora una obra de limitada atracción, rara en la colección de Marvel, "Guardianes de la galaxia" se convirtió en uno de los títulos más populares de la firma editora de historietas.

The Walt Disney Co. también validó el ascenso de "Guardianes" al lanzarla durante la primera semana de mayo, en vez de agosto, mes en el que salió el original. Marvel usó el mismo fin de semana para lanzar efectivamente la temporada veraniega durante la última década.

El debut de "Guardianes de la galaxia Vol. 2", que tuvo un costo de unos US$200 millones, es la segunda mayor recaudación del año, después de "La bella y la bestia", de Disney, que recaudó US$174,8 millones, pero también revierte la marea de secuelas decepcionantes, un flagelo en desarrollo para Hollywood. El verano pasado hubo una serie de secuelas que no estuvieron a la altura de cintas previas.

"Pasamos mucho tiempo viendo secuelas y el concepto de secuelitis", dijo David Hollis, jefe de distribución de Disney. "De veras, las películas de calidad pobre han sido las cosas que han sido rechazadas por los consumidores, más que nada. La ambición nuestra fue hacer algo que fuera increíblemente fresco y emocionante. Esteremos muy bien, siempre y cuando sigamos haciendo historias de gran calidad, creando mundos de alta calidad", agregó.