"Nos tildan de insensibles, pero no ven los daños que causa el comercio ilegal"
La proliferación del comercio ilícito es, en la actualidad, la principal preocupación del sector establecido. Así lo aseguró el nuevo presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Manuel Melero, quien en mayo reemplazó en su cargo a Ricardo Mewes.
Según el informe del Observatorio del Comercio Ilícito de la CNC, realizado sobre la base de cifras del Servicio de Aduanas, PDI y Fiscalía Nacional, en 2015 fueron confiscadas en nuestras fronteras 2.864.976 unidades de productos falsificados, 34% más que en 2014.
Esto equivalen a un valor comercial de US$45.420.881, precio de retail de estas mercancías si hubieran sido originales. Este valor supera los US$1.000 millones si consideramos que cerca de un 5% del universo de la mercancía que entra al país es revisado, y que no se incluye en esta estimación las falsificaciones, que se producen internamente.
Estamos -según el Observatorio- ante una pérdida fiscal que supera los US$160 millones si se vendieran como originales, sólo en esa arista del comercio ilícito.
¿Cómo evalúan la actualidad del gremio y el país?
-Yo quiero ser optimista, los empresarios debemos hacer un esfuerzo importante para sacar al país de su estancamiento. Todos sabemos donde estamos, unas regiones más que otras, claramente. Si no hacemos un esfuerzo nosotros, no veo quién lo hará porque el Estado chileno es más bien pequeño en su responsabilidad económica, el 75% de la actividad está en el sector privado. Hay que acelerar la inversión y para así mejorar las condiciones de empleo, ojalá de calidad.
¿Se deterioraron las condiciones de empleo en el país?
-Hemos visto una precarización del empleo con el aumento de los ocupados por cuenta propia y la economía informal que inunda nuestro país. Esa es nuestra principal preocupación. La Cámara creó el Observatorio del Comercio Ilícito donde estamos trabajando mancomunadamente con los municipios, el Servicio de Impuestos Internos (SII), Aduanas, Carabineros, Investigaciones y el Ministerio del Interior, para ver como enfrentamos este fenómeno.
¿Cómo impacta esta situación?
-Al producirse el freno económico aumentó el desempleo, pero muchos de estos desocupados están eufemísticamente empleados por cuenta propia. Hoy en Chile son cerca de 700 mil personas y la mayoría se ha ido al comercio informal, ahí hay un problema social. Esa persona que está en la calle ganándose la vida "honestamente" se hace un grave daño a sí mismo y también al país porque no tiene previsión, no paga impuestos y es una carga para los contribuyentes que deben proveerle salud, educación, previsión social... además es una competencia desleal para los que sí están establecidos y cumplen con todas sus obligaciones.
Electoralismo
Pero la situación del comercio callejero en Antofagasta, a simple vista, sigue en aumento. Hace pocos días la autoridad sanitaria alertó sobre un brote de hepatitis del cual responsabilizó a los comerciantes informales que expenden alimentos en la vía pública sin permisos.
¿Qué hacer para solucionar este problema?
-A nosotros nos tildan de egoístas e insensibles y no se ven los perjuicios que provoca el comercio ilegal, tampoco se ve que tras esa gente que está en la calle con su pañito hay cadenas de proveedores que son verdaderas mafias del contrabando. Yo veo poca voluntad para solucionarlo y mucho electoralismo en nuestras autoridades.
"Veo que hay poca voluntad para solucionar el tema del comercio callejero y mucho electoralismo en nuestras autoridades"."