El tren de Mayol
¿El candidato a La Moneda, Alberto Mayol, habrá sabido que ofrecer "un tren" ha sido "el caballito de palo de batalla " de casi todos los últimos aspirantes a La Moneda? ¿Le contaron que aún los sureños esperan el eterno "Tren al sur", sentados en las costosas estaciones que se construyeron para tal efecto, hoy abandonadas, antes de hacer su promesa electoral de construir ahora un tren de alta velocidad entre los dos extremos de Chile?
Definitivamente, el candidato Alberto Mayol, con su recurrente ofrecimiento electoral, obliga a que los aspirantes a La Moneda respalden debidamente con sus patrimonios personales o de sus socios sus megaideas, de lo contrario esta vez, terminarán todos los chilenos, no sólo los sureños, esperando "el tren de alta velocidad" a lo largo de todo Chile como la Penélope de Serrat.
Al parecer, el candidato Mayol "no ha entendido nada" de lo que ha pasado en Chile.
Luis Enrique Soler Milla
Primarias y el fútbol
La alegría de un país se une junto a la "Roja" de todos, apoyándola en la final de la Copa Confederaciones y con la esperanza de que la gane. De igual forma y como ciudadanos tenemos el desafío de participar en las primarias. Un desafío que se constituye en una grave responsabilidad cívica en vistas al bien común del país para poder elegir al mejor como candidato (a) a la presidencia de la república.
Ambas actividades se complementan y no se excluyen, pues el horario fijado nos permite ir a votar en la mañana y regresar tranquilamente a nuestras casas para ver la final del fútbol. Para nosotros como católicos y cristianos la construcción del bien común es una responsabilidad que no podemos evadir y el deber cívico de votar no lo podemos eludir. Y aun cuando el voto sea voluntario, la necesidad imperiosa de pensar en el bien de Chile nos interpela para no quedarnos cómodamente en nuestras casas y seguir manteniendo el actual estado de cosas que tanto daño ha causado al país. Es cierto el desprestigio de la política y los políticos, pero los cambios se logran con votos. Y en la cancha se ven los gallos, reza el dicho popular. Entonces, vayamos a votar y acompañemos a la "Roja".
Fco. Javier Astaburuaga O.
Debate
Hubo responsabilidades de los candidatos en el penoso espectáculo del debate de Chile Vamos. También hubo responsabilidades de los periodistas al dar la nota alta desde la primera pregunta, priorizando una denuncia sobre boletas y postergando importantes temas relativos a ideas y programas de los candidatos. Hubo responsabilidades de los canales en el formato adoptado, sin un conductor y sin mayor control al menos en cuestiones de forma. El debate fue peor que un combate de boxeo, como se ha dicho, ya que en el boxeo hay un árbitro que detiene la pelea o la reorienta cuando las reglas así lo exigen.
El gran perdedor no fue Chile Vamos ni ningún partido o coalición en particular. Quien más perdió fue el concepto que a Chile le hace bien que haya Primarias, y que éstas resulten serias y confiables (por cierto, el horario del debate ya había dañado notoriamente ese concepto). Lo preocupante es que la situación producida lleva agua al molino de aquellos dirigentes políticos que quieren seguir resolviéndolo todo "a dedo".
José Luis Hernández Vidal
Franja electoral
Menos mal que terminó la franja electoral de las primarias. Cero contenido y mucha descalificación.
Juan Silva
La "Roja" I
La participación de Chile en la Copa Confederaciones ha dado la vuelta al mundo. A tanto llega la buena impresión dejada por la "Roja", que ahora son los mismos argentinos quienes destacan la garra y el compromiso que ponen los jugadores nacionales.
Un medio trasandino señaló que si Argentina tuviera la mitad de la entrega de los futbolistas chilenos, serían campeones de todas las finales perdidas. Para tener en cuenta y sentir orgullo.
Juan Carlos Araya
La "Roja" II
Y Chile está donde tenía que estar, en la final, lo gritan de cordillera a mar, de ¡Visviri a Puerto Toro y hasta el Polo Sur! ¡Lo grito yo en Santiago y lo responde mi hijo en Chipre ! ¡Y somos grandes!
La historia vuelve a Rusia al 73 en ese partido de la "Roja" que nadie vio, pero que ahora ha reunido un pueblo entero vestido de rojo para decir que la emoción desborda y empapa el alma de orgullo por ser campeones de la adversidad y la entrega.
René Leiva