Jonathan Villella Coyán

Preocupación existe a propósito de los daños provocados en las floraciones de vegetales aparecidas las últimas semanas en el sector de Chanida, al norte de la ciudad.

Las complicaciones son derivadas de la destrucción del frágil ecosistema aparecido tras las últimas precipitaciones del 7 de junio último, un fenómeno que también fue visto en 2015, luego de las lluvias de marzo de este año y también en 2011.

Destrucción

Hasta ahora se ha detectado que "jeeperos" usan el sector para sus maniobras, lo que daña o mata los vegetales cortando el ciclo de vida y poniendo en peligro la disposición de semillas y la existencia de toda una cadena de otros animales cuyo desarrollo está vinculados a estas apariciones.

Carlos Guerra, doctor en Biología y director del Crea de la UA, precisó que las plantas que crecen en este desierto son extremadamente frágiles y tienen un proceso de crecimiento acelerado por cuanto deben reproducirse apenas tienen las condiciones de agua.

Aquí las lluvias son muy esporádicas y difícilmente pueden anticiparse, explica Guerra, entonces los vegetales no gastan sus energías en hacer grandes ejemplares, como árboles, sino pequeños y que rápidamente estén en condiciones de iniciar el proceso de polinización.

Una vez logrado este objetivo, las semillas pueden permanecer durante décadas a la espera de encontrar agua otra vez y así repetir esa experiencia.

¿Y por qué la vegetación aparece en Chanida? Guerra puntualizó que ello puede depender de las condiciones del terreno y naturalmente de la cantidad de semillas que estén presentes.

Por esta razón, cuando precipita de forma suficiente y en una época precisa, aparece el desierto florido y luego una pequeña fauna de insectos, pequeños reptiles como lagartijas, y roedores, como pequeñas ratas que también aceleran su reproducción cuando ocurre este tipo de fenómenos.

Se estima que el máximo esplendor de las floraciones vegetales podría ocurrir en septiembre, siempre y cuando la destrucción no continúe, tanto por acción de los automovilistas, como de quienes arrojan basura (bolsas plásticas y materiales similares), y de las personas que pisan los vegetales y así interrumpan la vida.

Diversidad

Mauricio Quezada, presidente de la agrupación medioambiental "Caminantes del Desierto", apuntó sobre el enorme valor entre la diversidad de flora y fauna que puede apreciarse en Antofagasta, en especial luego de los frentes de mal tiempo, pero también declaró su inquietud por los daños provocados por las personas (ver entrevista de la derecha).

"Lamentablemente la actividad deportiva que se da en el lugar, específicamente la de los automovilistas y de las motos (ATV), daña los pequeños brotes que están creciendo en el sector impidiendo su desarrollo normal y germinación de la semilla", precisó.

en el desierto florido

Inquietud por daños

en el desierto florido